La polémica, continúa... Chile es noticia en todo el mundo por la visita del Papa Francisco y las consecuencias que dejó su presencia en el país, pero por sobre todo, por sus respaldo al obispo de Osorno, Juan Barros, quien es acusado de encubrir a Fernando Karadima. Ante esto, Francisco, pidió disculpas por pedir pruebas ante los delitos a los que se les acusa a Barros.
“La palabra prueba es la que me traicionó, yo hablaría de evidencia. Yo sé que hay mucha gente abusada que no puede tener una prueba, no la tiene y que no puede o a veces la tiene, pero tiene vergüenza y la tapa y sufre en silencio”, indicó el Sumo Pontífice según consigna La Tercera. Agregando
“Les pido perdón a ellos si los herí sin darme cuenta, fue una herida sin querer (...) Sé cuánto sufren y sentir que el Papa les dice en su cara tráiganme una carta es una cachetada. Y ahora me doy cuenta que mi expresión no fue feliz, porque no pensé en eso y entiendo como dice el apóstol Pedro en una de sus cartas, el incendio que se levantó. Esto es lo que puedo decirte con sinceridad”, afirmó. Finalmente, manifestó que “
Barros seguirá ahí si no encuentro forma de condenarlo, yo no puedo condenarlo si no hay, no digo pruebas, evidencias”. Asegurando que no hay evidencias que hayan llegado al Vaticano.
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