El candidato de ultraderecha que se posiciona como favorito de los ciudadanos brasileños, según las encuestas, ha llamado la atención de la audiencia por sus polemicas frases. Bolsonaro ha expresado su homofobia en temas de género a través de polémicos dichos a lo largo de la vida pública que presenta como militar de reserva y político. "Al hijo que empieza a verse así, un poco gay, hay que darle una buena tunda para cambiar su comportamiento, ¿no? Algunas personas que conozco me han dicho 'qué bueno que me pegaron de niño, mi papá me enseñó a ser hombre'", expresó en 2010. "No voy a combatir ni a discriminar, pero si veo a dos hombres besándose en la calle, les voy a pegar", afirmación por la que fue multado con 150 mil reales, 730 mil pesos chilenos aproximadamente. A pesar de las críticas, el candidato cuenta con cinco millones de seguidores en Facebook y dos millones y medio en Youtube, convirtiéndose así en el precandidato presidencial más popular del mundo virtual, según El Mundo. Los dichos racistas y en contra de los pobres de Brasil no han estado ausentes de su repertorio. "El pobre sólo tiene una utilidad en nuestro país: votar. La cédula de elector en la mano es diploma de burro en el bolsillo. Sirve para votar el gobierno que está ahí. Sólo sirve para eso y nada más", afirmó. En la década del 90, el cuestionado candidato dijo estar a favor de la pena de muerte para frenar la miseria de Brasil. “Defiendo la pena de muerte y el rígido control de la natalidad, porque veo la violencia y la miseria que cada vez se extiende más por nuestro país. Quien no tiene condiciones de tener hijo, no debe tenerlos", sentenció. El 60% de su electorado son jóvenes, detalló El País (España). Su éxito reside en la fuerza que tiene en las redes y "al igual que el Trump, en su actitud de rebeldía y de decir lo que le da la gana", detalló Mauro Paulino, director del Instituto de encuestas Datafolha, al medio citado. En esta línea, el representante del partido social liberal ha expresado opiniones en contra de las mujeres. "Quédate ahí, María del Rosario, quédate. Hace unos días, me llamaste violador, en el Salón Verde, y te dije que no iba a violarla a usted porque usted no merece. Quédate aquí para oír.", le dijo a la diputada del PT. "Ella no merece (ser violada), porque ella es muy mala, porque ella es muy fea, no es de mi gusto, jamás la violaría. Yo no soy violador, pero si fuera, no la iba a violar porque no lo merece", detalló más tarde sobre sus polémicos dichos.
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