Ante esto, uno de los episodios que lo marcó, fue el terremoto de 2010 en el país. “Encima mi mujer estaba embarazada de ocho meses y estábamos en el piso 14. ¡Pensé que se caía todo! Después, cuando bajamos, para ellos era normal, decían que no pasaba nada, que los edificios estaban preparados”. El trasandino volvió a ratificar que “la U de Chile es un club al que le tengo mucho cariño, salimos campeones y llegamos a semi de Libertadores, pero fueron varios los momentos complicados que tuvimos que pasar allá”.
Motnillo también recordó que “el nacimiento de Santino fue otro: estuvo 60 días en terapia intensiva y yo tenía que seguir jugando. Dormía en el hospital y me iba a entrenar directo. Eso la gente me lo valoró y la relación se hizo muy fuerte”.