Los máximos referentes del país sudamericano han llegado a un acuerdo con los protestantes, para así derogar las reformas, eliminar los subsidios de los combustibles y terminar de una vez con lo cortes de carreteras. Los últimos días han sido una verdadera pesadilla para el pueblo ecuatoriano y todo podría terminar en las próximas horas, si se cumple con lo acordado.
El Gobierno y los indígenas de Ecuador pudieron sentarse en un escritorio y tratar los temas más importantes de las últimas horas, lo que estaba provocando una ola enorme de protestas en las calles del país. Los mismos han llegado a un acuerdo, mediante el cual se derogará el decreto 883, el que termina con todo lo mencionado anteriormente, dejando de lado cada uno de los problemas que habían surgido.
"Como resultado del diálogo se establece un nuevo decreto que deja sin efecto el decreto 883, para lo cual se instala una comisión que elaborará este nuevo decreto", comunicó el coordinador de las Naciones Unidas en Ecuador, Arnaud Peral, luego de varias horas de dialogo. Esto sería el puntapié inicial de un tratado de paz para que se termine de una vez por todas con las impresionantes cosas que están sucediendo en las calles.
"Con este acuerdo se terminan las movilizaciones y medidas de hecho en todo el Ecuador y nos comprometemos de manera conjunta a restablecer la paz en el país", señala el texto creado. Además, Peral dijo: "Una situación grave desde hace doce días. Ha habido muertos, heridos, personas que han perdido su empleo, que han sufrido por sus familias, muchísima angustia. Ya llegó el momento de la paz, del acuerdo, el momento de mirar el futuro para Ecuador".
Otro que también habló fue Rafael Correa, el ex presidente de Ecuador. "Las cosas que están pasando son durísimas. Primero, muchas gracias por esta entrevista, por permitirnos dar a conocer al mundo lo que está pasando en Ecuador, por responder a las mentiras que dijo hace uno o dos días el presidente Moreno a esta misma cadena. Los momentos que vive Ecuador son los más duros de su historia, en una historia ya bastante dura", comentó.
"Desde que tengo uso de razón no he visto una represión tan brutal como la que está sufriendo mi pueblo en estos momentos. Hay varios muertos, centenas de heridos, más de setecientos detenidos. La violencia de las Fuerzas Armadas y sobre todo de la policía es terrible, pateando ciudadanos en las calles, echándole los caballos encima, bombas lacrimógenas, balas de plástico", explicó el ex mandatario.
"Ha habido también desmanes de parte de los manifestantes, pero no son la mayoría. Por supuesto son condenables, tienen que responder ante la ley, pero no es verdad que todos son vándalos o terroristas. La mayor cantidad de gente es pacífica, pero también la han reprimido", culminó diciendo Correa, el que reflejó de cierta manera lo que se vivió en los últimos días por las carreteras ecuatorianas.