El boliviano Moisés Villarroel recuerda su paso por Universidad de Chile como un momento de aprendizaje, halagando a los azules. Pese a que su estadía sólo duró seis meses, el volante le tomó cariño al club y siempre lo recuerda. Allí vivió situaciones divertidas, y otras que no lo llevaron a tanta gracia. Por eso, destacó algunas de las cosas más interesantes.
Villarroel era una de las promesas del deporte boliviano, quien llegó a probar suerte a la U y alcanzó a estar un par de meses, pero que finalmente no pudo debutar en el fútbol profesional. En conversación con AS Chile, el hoy volante del Jorge Wilstermann dejó buenas frases para los aficionados.
De esa manera, comenzó relatando cómo fue uno de los asados que tuvo en el CDA: «Yo iba en bicicleta a entrenar porque me quedaba cerca y no podía manejar (al ser menor de edad). Así llegaba yo, mientras el resto iba en sus Audi o autos caros (ríe)».
«Entonces un día dejé la bicicleta casi adentro del camarín, y fui a comer (al asado). Cuando quería irme, busqué mi bicicleta y me la habían agarrado Gonzalo Espinoza y Pepe Rojas. Le habían sacado las llantas, y le habían puesto dos pesas de gimnasio. Espinoza era muy molestoso», sumó a sus dichos.
Lo más complejo es que Moisés, según comentó él mismo, no veía las llantas. «No me querían decir dónde estaba. Estuve media hora dando vueltas. En un momento me molesté y ellos lo notaron. Ahí me dijeron que las llantas estaban cerca de la piscina. Me demoré en armarla otra vez».
