Gonzalo Blumel dejó de ser el ministro del Interior para dar paso al senador UDI y "delfín" de Pinochet, Víctor Pérez.
Como un golpe de timón a la conducción del gobierno de Sebastián Piñera se tomó este cambio de gabinete, en el que la UDI y RN aumentan presencia para dar mayor "gobernabilidad". El principal nombre es el de Víctor Pérez, quien asume como ministro del Interior.
Hace unos años atrás Víctor Pérez sostuvo que las farmacias populares era un perjuicio para el país. “Las farmacias populares son una medida a la cual le falta análisis y parece más bien una medida demagógica de la izquierda, más que una solución verdadera para los pacientes de menos recursos de los municipios”, sostuvo.
Agregó que “todas las personas beneficiarias del Fondo Nacional de Salud, Fonasa, tienen derecho a recibir sus remedios de forma gratuita a través de los centros de atención primaria de salud, consultorios y Cesfam”.
Por lo tanto, dijo Pérez Varela, “por qué potenciar las 'farmacias populares' si los pacientes de Fonasa pueden acceder en forma gratuita a sus remedios, es un tema que las autoridades municipales tienen que revisar”.
Puntualizó que “si el objetivo es fortalecer la salud pública a la cual acceden los sectores más vulnerables de la población, la verdad es que los alcaldes entonces deberían utilizar los recursos para reforzar las farmacias de los consultorios y Cesfam”.
El senador de la UDI fue más allá y añadió que “incluso con esta medida se puede provocar un debilitamiento de estos centros de atención que dependen de los municipios y en consecuencia, lejos de beneficiar a los más pobres, se les va a estar perjudicando”.
Recalcó que “es muy fácil adoptar medidas populistas y mediáticas, pero claramente cuando se hace una análisis más profundo, nos damos cuenta que este tipo de acciones poco y nada favorecen a los sectores de menos recursos”.
Agregó que “sería bueno que los alcaldes escucharan a los especialistas del Colegio Médico que ya han advertido respecto a la inconveniencia de estas farmacias populares, ya que finalmente no favorecen a los sectores más vulnerables como se asegura”.
FInalmente las Farmacias populares fueron todo un éxito, incluso, instaurándose en municipios de derecha.