Ya han pasado seis días de la desaparición del niño de tres años, por lo que cada segundo que pasa es vital.
Tomás Bravo aún no aparece y una nueva hipótesis sobre su pérdida comienza a tomar más fuerza que las anteriores. En estas horas, la fiscalía sumó una nueva idea de lo que puede haber pasado, por lo que la investigación podría modificarse en Arauco. La nueva mirada sería con un accidente de tránsito y el posterior secuestro del menor entre los papeles.
Todo esto estaría vinculado con el lugar en que habría sido visto por última vez el niño, quien se perdió a pocos metros de una ruta bastante transitada. "Se están trabajando todas las líneas investigativas. Son tres con más fuerza y una cuarta. Se están haciendo diligencias en todas y cada una de ellas, pero no puedo decir el contenido de las mismas a fin de resguardar la investigación", dictó el fiscal jefe de Arauco, José Ortiz.
Teniendo en cuenta lo que se había informado, Tomás Bravo fue visto por última vez el miércoles cerca de las 19:30 horas, en un predio ubicado en un sector rural, en la ruta que une a Lebu con Arauco. En la región del Biobío, el pequeño desapareció mientras iba con su tío a buscar unos animales a un campo cercano.
No obstante, su tío regresó para buscar un animal que se había apartado del resto, dejando a Tomás en el lugar en el que luego se le perdió el rastro. Tras darse cuenta que el niño no estaba más allí, inició una desesperada búsqueda, aunque no pudo dar con él. Después de unos minutos, regresó a la casa para avisar al resto de la familia lo que había pasado.
Después de la noticia que cambió para siempre sus vidas, la familia no dudó en recurrir a Carabineros, dejando una denuncia por su desaparición a las 21:05 horas del mismo miércoles. En ese sentido, se sabe que pasó poco más de una hora y media después de que se perdiera el rastro a Tomás.
