La edición 194 del épico enfrentamiento entre
Universidad de Chile y
Colo Colo tiene novedades, con
Pellegrino como protagonista. El equipo universitario, ansioso por romper una racha adversa de diez años sin vencer a su archirrival y recuperarse de seis partidos sin victorias, se encuentra en pleno trabajo estratégico. El estratega está ideando ajustes en la formación en comparación con el último partido en el que sufrieron una derrota contra Unión La Calera. En medio de estas maniobras tácticas, se ha revelado una información intrigante. Según lo informado por Radio Cooperativa, en el frente de ataque de
Universidad de Chile, se vislumbra el regreso de una dupla crucial: Leandro Fernández y Nicolás Guerra. El argentino, previamente suspendido debido a un incidente con el árbitro en el partido contra O'Higgins en la vigésima jornada, ha cumplido su suspensión y está programado para ser parte de la alineación inicial. Esto significa que Cristián Palacios se mantendrá en el banquillo. Tanto Guerra como Fernández han sido figuras destacadas en el ataque del equipo a lo largo del torneo. Sin embargo, su última colaboración en el campo fue en contra de los rancagüinos, un enfrentamiento que dejó al canterano azul, Guerra, con una tarjeta roja. En ese partido,
Universidad de Chile sufrió una derrota por 5-2, con Darío Osorio y Jeison Fuentealba marcando goles para los azules.
Decisiones complejas para Pellegrino
La decisión de reunir nuevamente a Fernández y Guerra en el frente de ataque parece ser la carta definitiva de Pellegrino para el emocionante encuentro en el Estadio Santa Laura. No obstante, las incertidumbres persisten en el centro del campo. Emmanuel Ojeda regresará al terreno de juego, mientras que Federico Mateos trabaja arduamente para superar sus molestias y tener la oportunidad de enfrentar a
Colo Colo. En cuanto a la posición dejada vacante por Osorio, las opciones viables incluyen a Israel Poblete y Lucas Assadi. En la línea defensiva,
Pellegrino se enfrenta a una decisión crucial. Todo apunta a que optará por una formación con cuatro defensores. En esta configuración, Ignacio Tapia podría ser el sacrificado después de haber sido titular en la derrota ante Unión La Calera. Los días que se avecinan serán de gran importancia para
Universidad de Chile, ya que deberán lidiar con suspensiones, lesiones y transferencias que afectarán la alineación titular.
