Netflix ha estrenado en su catálogo “Estado Eléctrico”, una película de ciencia ficción dirigida por los hermanos Anthony y Joe Russo, reconocidos por su trabajo en el Universo Marvel. Con un presupuesto de 320 millones de dólares, esta producción busca demostrar que las superproducciones pueden triunfar en streaming sin necesidad de pasar por la taquilla tradicional. La producción combina acción, aventura y una estética retrofuturista inspirada en la década de 1990.
La historia de “Estado Eléctrico”, película ahora disponible en Netflix, sigue a Michelle, interpretada por Millie Bobby Brown, una joven que emprende un peligroso viaje por un mundo devastado tras la insurrección fallida de los robots. Acompañada por Cosmo, un robot con apariencia de dibujo animado, y Keats, un contrabandista encarnado por Chris Pratt, Michelle busca a su hermano menor, Christopher, a quien creía perdido. En su travesía, se enfrenta a un sistema donde los humanos, abrumados por la realidad, se refugian en tecnologías de realidad virtual.
Inspirada en la novela gráfica de Simon Stålenhag, “Estado Eléctrico” construye un mundo distópico en el que los robots han sido marginados tras su intento de rebelarse contra la humanidad. En medio de la desesperación y la decadencia, Michelle emerge como una figura desafiante, decidida a descubrir la verdad sobre su hermano y el nuevo orden que domina el planeta. La película mezcla nostalgia y una crítica a la dependencia tecnológica de la sociedad.
La nueva apuesta de Netflix
El elenco de la película está conformado por nombres de peso en la industria, incluyendo a Ke Huy Quan, Jason Alexander, Giancarlo Esposito, Stanley Tucci y Woody Norman. Además, actores como Woody Harrelson, Anthony Mackie y Brian Cox prestan sus voces a los robots en la versión original. El guion estuvo a cargo de Christopher Markus y Stephen McFeely, conocidos por su trabajo en "Avengers: Endgame", lo que refuerza la magnitud de esta producción.
El estreno de “Estado Eléctrico” representa un gran reto para Netflix, que busca afianzarse en el mundo de las megaproducciones sin pasar por los cines. Ahora, la gran interrogante es si la película logrará cautivar a la audiencia y justificar su multimillonaria inversión. Con una propuesta visual impactante y una historia que combina acción y reflexión sobre la relación entre humanos y tecnología, el filme promete dar mucho de qué hablar en los próximos días.