En los primeros días de diciembre, los jugadores de Universidad de Chile encendieron la curiosidad de los habitantes de Talagante con un inesperado mensaje en redes sociales. En plena temporada de vacaciones, los deportistas invitaron a la comunidad de la zona a prestar atención a lo que parecía un anuncio especial relacionado con el club. Las expectativas crecieron rápidamente, alimentando rumores sobre el tan anhelado estadio propio.
Sin embargo, la sorpresa fue otra. El club azul inauguró una nueva escuela oficial en Talagante, dejando a los fanáticos con emociones encontradas. Aunque la noticia fue recibida con entusiasmo por algunos, no era el gran proyecto que muchos soñaban. Pese a esto, la ilusión de contar con un recinto en la comuna no está tan lejos de la historia del club como podría pensarse.
Carlos Álvarez Esteban, alcalde de Talagante y declarado hincha de la "U", reveló una propuesta que hizo hace algunos años y que, de haberse concretado, habría cambiado el rumbo del equipo. “Ofrecí un terreno municipal de 20 hectáreas en Camino El Oliveto, pero no aceptaron”, confesó el edil en una entrevista reciente. Esta oferta, realizada en 2017, buscaba acercar al equipo a los fanáticos de la comuna y facilitar un proyecto emblemático para el estadio propio.
La U no aceptó el terreno para el estadio propio
El espacio, ubicado estratégicamente entre 26 y 33 kilómetros del Centro Deportivo Azul y el Estadio Nacional, tenía conexión directa con la Autopista del Sol. Sin embargo, el gran desafío era su clasificación como zona rural, lo que habría requerido un cambio en el uso de suelo. Según Álvarez, la concesionaria simplemente respondió que “no estaban interesados por ahora”, dejando el proyecto como un sueño que nunca avanzó.
A pesar de la negativa, el gesto del alcalde reflejó su amor por el club y el deseo de aportar al desarrollo del equipo. Aunque el proyecto quedó en el pasado, su historia es un recordatorio de las oportunidades que estuvieron cerca de materializarse, manteniendo viva la esperanza de los hinchas de Talagante de que, algún día, el sueño azul se haga realidad con el estadio propio.