Universidad de Chile vivió una noche redonda en el Estadio Nacional tras imponerse con autoridad a Carabobo, resultado que les permite soñar con la clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores. El equipo dirigido por Gustavo Álvarez mostró una versión sólida y convincente, dejando atrás el tropiezo reciente ante Estudiantes de La Plata. Uno de los aspectos más celebrados fue el retorno de Charles Aránguiz, quien no solo sumó minutos sino que fue clave en la conducción del equipo.
El primer tanto del encuentro llegó gracias a una joya de balón detenido. Matías Sepúlveda ejecutó un tiro libre con una precisión impecable a los 30 minutos, dejando sin opciones al portero rival. El gol abrió el camino para que los azules dominaran el resto del compromiso con tranquilidad y eficacia, y marcó un punto de inflexión anímico para el equipo.
En el segundo tiempo, Charles Aránguiz amplió la ventaja desde los doce pasos, demostrando frialdad y jerarquía a los 65 minutos. Más adelante, Matías Zaldivia aprovechó un balón peinado en el área para empujar el tercero a los 81', y cuando ya el partido expiraba, Israel Poblete conectó de cabeza para poner el 4-0 definitivo en el minuto 90.
Charles Aránguiz habló tras los dichos del “Tucu”
Tras el encuentro, Sepúlveda compartió detalles sobre su anotación y el respaldo de sus compañeros: “Vi al arquero esperando un centro, pero Charles me dio la confianza. Me dijo que le pegara al arco y por suerte entró”, relató. El mediocampista también destacó el trabajo físico que realiza fuera del club y el respaldo constante de su entorno más cercano.
Por su parte, Charles Aránguiz comentó entre risas: “Le voy a decir al Tucu que no diga esas cosas, pero sí, se tenía fe. Había otra opción, pero en esos momentos uno siente que puede pasar”. El experimentado volante valoró la actuación del equipo: “Jugamos con paciencia, sabíamos que teníamos tiempo y lo fundamental era ganar. Convertir cuatro goles en este torneo no es común, así que hay que valorar lo hecho”.