La reciente propuesta del excandidato presidencial Marco Enríquez-Ominami ha generado revuelo en el ambiente político y deportivo chileno. Durante su participación en el canal de YouTube “Rayando el CDA”, el también cineasta planteó una idea que mezcla infraestructura deportiva y campaña electoral: ofrecer un plan concreto para la construcción del estadio de Universidad de Chile, a cambio del respaldo de la hinchada azul para una eventual candidatura presidencial.
En su intervención, Enríquez-Ominami detalló el modelo de financiamiento del estadio, basado en colaboración público-privada. “Es un plan de obra pública con aporte público y privado, donde el Estado pone las reglas o garantías y el privado pone la plata, pero cumple y contrata gente, yo quiero crear un millón de empleos”, declaró, asegurando que el proyecto busca no solo entregar un estadio, sino también dinamizar la economía mediante la generación de trabajo.
Uno de los puntos destacados en la entrevista fue la mención a la comuna de Cerrillos, donde MEO aseguró haber conversado con la alcaldesa respecto a la viabilidad del proyecto. Según sus palabras, Universidad de Chile ha estado cerca en otras ocasiones de concretar el anhelado estadio propio, y este nuevo impulso podría acercarlos aún más al objetivo si encuentra apoyo ciudadano y político.
¿Se viene el estadio de la U?
En ese contexto, se dio a conocer que el terreno considerado para la construcción estaría ubicado en la Ciudad Parque Bicentenario, específicamente en la manzana 18, entre Avenida Departamental y General Velásquez. La ubicación se consideraría estratégica por su conectividad, al contar con accesos tanto a carreteras como a estaciones de metro, y se contemplaría un plan de seguridad para mitigar posibles molestias a los vecinos.
Aunque en el pasado también se han explorado alternativas fuera de Santiago, como la comuna de Lampa, la reactivación del tema por parte de Enríquez-Ominami ha vuelto a posicionar a Cerrillos como la opción más concreta. Esta iniciativa, lanzada en vísperas de un nuevo aniversario del club universitario, ha dividido opiniones entre quienes la ven como una promesa populista y quienes la consideran una posibilidad real para cumplir el antiguo sueño de los hinchas laicos de contar con un estadio propio.
