La Universidad de Chile se prepara con entusiasmo para el Superclásico 197 de este sábado, donde recibirá a Colo Colo en el Estadio Nacional. La ilusión es grande: sumar tres puntos los dejaría a solo una unidad de los líderes, Coquimbo Unido y Audax Italiano, un paso crucial para encarar con firmeza la segunda rueda de la Liga de Primera 2025. Sin embargo, el optimismo se mezcla con la preocupación por una serie de bajas importantes que complican al técnico Gustavo Álvarez.
El panorama ofensivo de Universidad de Chile ya presenta complicaciones. Leandro Fernández es el primer descartado debido a problemas físicos, una ausencia sensible en el ataque azul. A esto se suma la baja de Lucas Di Yorio, quien no estará disponible por suspensión tras recibir doble tarjeta amarilla contra Unión Española. Estas ausencias obligan a Álvarez a reconfigurar su delantera en uno de los partidos más importantes del semestre.
Pero los problemas no se limitan al sector ofensivo. La zaga también genera inquietud, ya que este jueves Franco Calderón no pudo entrenar con normalidad. El defensor arrastra molestias en la planta de su pie, una dolencia que ya lo había marginado del encuentro frente a los hispanos. La incertidumbre sobre su estado físico añade un dolor de cabeza más para el cuerpo técnico, que evalúa su participación hasta último momento.
Posibles movimientos en Universidad de Chile
De no estar en condiciones óptimas, y considerando la intensa seguidilla de partidos que se avecinan para el "Bulla", la decisión sería no arriesgar a Calderón contra el "Cacique". En ese escenario, todo parece indicar que Nicolás Ramírez será el encargado de tomar su lugar en la línea defensiva. Esta posible modificación, a pocas horas del encuentro, refleja la necesidad de Álvarez de ajustar el equipo ante las adversidades.
De esta manera, la Universidad de Chile afina su posible formación para enfrentar a Colo Colo, manteniendo la suplencia de Marcelo Díaz. El once tentativo que se perfila es con: Gabriel Castellón en el arco; Fabián Hormazábal, Nicolás Ramírez, Franco Calderón (o su reemplazo), y Matías Sepúlveda en defensa; Charles Aránguiz, Israel Poblete y Javier Altamirano en el mediocampo; para dejar en ataque a Maximiliano Guerrero, Lucas Assadi y Rodrigo Contreras. La incógnita de Calderón es la última pieza en un rompecabezas que Álvarez busca armar para el clásico.