El delantero de Colo Colo, Javier Correa, se convirtió en una de las figuras más polémicas del Superclásico. Más allá de las disputas en la cancha, como la falta que, según la Universidad de Chile, debió haber resultado en su expulsión, sus celebraciones tras el triunfo por la cuenta mínima han generado una nueva controversia. Estos gestos, aunque no se transmitieron por televisión, fueron capturados por fotógrafos y se han vuelto virales en redes sociales.
Una vez finalizado el partido, Javier Correa celebró con una euforia particular. Su primer gesto fue dirigido a la Garra Blanca, la barra de Colo Colo. El jugador se agachó para hacer una señal de “chiquitito” con las manos, en clara alusión al clásico rival. Posteriormente, se acercó a la tribuna Océano mientras los hinchas coreaban un cántico que decía: "el chuncho no lo puede creer, Colo Colo es lo más grande y la Garra Blanca los c… otra vez".
Ante la melodía, Correa respondió con un gesto técnico con sus brazos que, según el periodista Ernesto Contreras de Radio Cooperativa, era una clara alusión a la parte final de la canción. Contreras describió la celebración como un espectáculo, comparándola con los movimientos del cantante El Puma Rodríguez al interpretar el tema "Chévere, Chévere".
Polémica de Javier Correa
La conducta de Correa no solo ha generado el descontento de los hinchas de la Universidad de Chile, sino que también ha llevado al club a considerar acciones formales. La directiva azul estaría estudiando la posibilidad de solicitar al Tribunal de Disciplina de la ANFP que sancione al delantero por su comportamiento, lo que podría acarrear consecuencias para el argentino.
Este no es el primer conflicto de Javier Correa con el equipo rival. Previamente, en una conferencia de prensa, el futbolista respondió a las declaraciones de Marcelo Díaz, acusándolo de "mostrar la hilacha" y de "decirse ser diferentes" por su reacción ante una pregunta sobre Colo Colo. Aunque el volante de la U ha declarado que su gesto fue una coincidencia, el delantero de Colo Colo ha optado por un estilo de juego y comportamiento que, sin duda, ha polarizado la opinión pública.
