El último episodio del programa Primer Plano (CHV) generó polémica al revelar la venta de un ropero de lujo perteneciente a la madre de Coté López, empresaria y figura pública. Entre las prendas ofrecidas destacaban una cartera Louis Vuitton valorada en $2.100.000, zapatos Valentino de $500.000 y una gabardina Burberry de $2.300.000, lo que desató fuertes comentarios en su contra. Ante las críticas, López salió al paso defendiendo la decisión.
Consultada por el equipo del estelar, Coté López aclaró: "Yo no sé por qué les llama tanto la atención esto, solamente le pasé algunas cosas que no estaba usando a mi mamá y las vendió, eso sería todo". Sin embargo, en redes sociales la acusaron de "hacerse la del pueblo", una afirmación que la molestó. "Yo nunca me he hecho la del pueblo, yo soy como soy", respondió, recordando que su propia marca de ropa ofrece precios accesibles.
El debate escaló cuando la panelista Adriana Barrientos intervino, vinculando el tema con su pasado romance con el exfutbolista Luis "Mago" Jiménez, exmarido de López. Sin rodeos, Barrientos comentó: "Pucha, re fome poh. Deshacerte de cosas que son lindas", y reveló que ella conserva regalos similares que recibió del mismo hombre. "Son muchos objetos que ella dice que tienen un valor sentimental, que se los regaló el marido… a mí también me regaló el marido de ella, justamente, esas mismas carteras", afirmó.
Coté López vuelve a estar en la mira por Luis Jiménez
Además, Barrientos añadió con ironía: "Yo todavía las conservo, por lo mismo, son recuerdos de mi pololeo con su marido". Sus declaraciones agregaron más leña al fuego en un debate que ya había captado la atención del público. Mientras algunos cuestionan el gesto de vender regalos con supuesto valor sentimental, otros defienden el derecho de López a disponer de sus pertenencias como mejor le parezca.
La discusión refleja una vez más cómo las decisiones personales de figuras públicas pueden convertirse en tema de opinión masiva. Mientras Coté López insiste en que no hay mayor trasfondo en la venta, las redes y los programas de farándula siguen analizando cada detalle, demostrando que, en la era digital, hasta un armario puede ser noticia.