En febrero pasado, la exintegrante del programa Mekano, Ruth Gamarra, tuvo que someterse a una compleja cirugía debido a una necrosis en la cadera. Lo que comenzó como un diagnóstico sin mayores alarmas, terminó afectando profundamente su calidad de vida. A lo largo de estos diez meses, ha dependido de muletas para movilizarse, lo que ha limitado sus actividades como microempresaria y generado una fuerte presión económica.
El impacto financiero de su tratamiento ha sido significativo. En una entrevista con LUN, la paraguaya reveló que ya ha gastado cerca de $30 millones en procedimientos médicos, medicamentos, resonancias, biopsias y consultas con especialistas. A esto se suma la ausencia de un seguro médico que cubriera los gastos, ya que su póliza de salud había expirado hace dos años. Aunque contaba con un seguro oncológico, este no aplicaba para su operación, al tratarse de un tumor benigno.
Para enfrentar la situación, Ruth Gamarra ha tenido que recurrir a diferentes estrategias. "Mi familia ha sido un gran apoyo, pero ha sido complicado. Vendí mi camioneta y este año no pude trabajar en la Feria de Emprendedores en Navidad, que es una fecha clave. Por ahora, estoy usando tarjetas de crédito y haciendo malabares para salir adelante", confesó.
Ruth Gamarra y una noticia que impacta
A pesar de las dificultades, la exbailarina se niega a rendirse. “No quiero que me vean como una víctima. Estoy comprometida con mi recuperación y daré lo mejor de mí para superar este momento. Tengo fe en que podré volver a estar en mi mejor forma”, expresó con optimismo. Su determinación la ha llevado a buscar nuevas alternativas de ingreso, mostrando su espíritu emprendedor.
En este contexto, Ruth Gamarra tomó la decisión de incursionar en la creación de contenido para adultos, como una forma de generar recursos adicionales. "Nunca pensé en abrir una cuenta de este tipo porque no lo necesitaba, pero me ofrecieron un contrato que respeta lo que quiero mostrar. Tengo 47 años, soy abuela, y mi hija Kiara, que vive en California, me animó a hacerlo. Me dijo: ‘mamá, adelante’", relató. Así, sigue demostrando que, incluso en los momentos más difíciles, su fortaleza y resiliencia no tienen límites.
