La noche del domingo en Primer Plano fue escenario de un tenso momento que terminó con la abrupta salida de la panelista Cecilia Gutiérrez del estudio. La periodista de espectáculos rompió el silencio este lunes para aclarar la incómoda situación que la enfrentó con Natalia Casas-Cordero, invitada al programa, quien la amenazó en vivo con revelar un supuesto "secreto". El incidente ha generado una ola de especulaciones y ha puesto el foco en las disputas internas del mundo farandulero.
El altercado escaló rápidamente cuando Casas-Cordero, en medio de una discusión con Naya Fácil, giró su atención hacia Cecilia Gutiérrez y lanzó una advertencia críptica: “Cecilia es una persona que no debería ni siquiera estar refiriéndose a mi así porque no te conviene o le contamos a la gente qué página manejas tú”. La velada amenaza llevó a la intervención del animador Julio César Rodríguez, quien intentó calmar los ánimos. Sin embargo, Cecilia Gutiérrez optó por abandonar el set de manera inesperada, dejando a la audiencia y al panel atónitos.
A través de un video en Instagram, Cecilia Gutiérrez abordó lo sucedido, descartando de plano la principal acusación: ser la dueña o tener relación alguna con el popular sitio web de farándula Infama. “No soy dueña ni tengo relación alguna con el sitio web ‘Infama’”, escribió la comunicadora, buscando desvincularse de inmediato de la especulación. Además, explicó que su retiro de pantalla fue una "decisión personal, tomada para protegerme frente al hostigamiento constante por parte de Natalia Casas-Cordero. La producción de Primer Plano estaba al tanto de esta acción".
Cecilia Gutiérrez no se quedó en silencio
En su extenso descargo, Gutiérrez reveló el origen de la animadversión de su colega, con quien en el pasado mantenía una buena relación. Según su relato, hace tres años, Natalia Casas-Cordero, dueña de "Maldita Farándula", desarrolló una "obsesión" con Infama y, tras una "investigación" propia, concluyó erróneamente que la página era manejada por una persona que Cecilia conocía, y que ella era su "palo blanco". “Este era mi palo blanco para que yo tuviera esta página y actuara desde las sombras. Eso se instaló como una verdad, no sólo en ella, sino que en varios panelistas, tiktokeros, y personas que convenientemente repiten continuamente que yo soy la dueña de Infama”, afirmó Gutiérrez, desmintiendo categóricamente la información.
Finalmente, la periodista detalló el calvario de acoso que ha sufrido por parte de Casas-Cordero y sus cercanos, incluyendo la publicación de su número de teléfono y datos personales en redes sociales, así como el envío de mensajes ofensivos. Cecilia Gutiérrez explicó que, si bien inicialmente no desmintió el rumor de Infama por considerarlo "absurdo", la repetición constante de la mentira la obligó a hablar. Su reacción en el programa fue una medida premeditada: “La producción sabía de este problema, yo se lo había comunicado, y también sabían que si yo sentía amenazada mi integridad, me iba a parar del set y me iba a ir”, concluyó, evidenciando la magnitud del hostigamiento que venía sufriendo.