Hace poco más de un año, Isidora Valencia, conocida como "Belleza Chilena" en la plataforma de contenido para adultos Arsmate, decidió dar un giro radical a su vida laboral. Proveniente de Curacaví y con una historia de esfuerzo y superación, la joven ha logrado transformar sus ingresos de manera sorprendente, alcanzando cifras que antes le parecían inalcanzables.
En conversación con Julio César Rodríguez, Isidora Valencia recordó sus inicios en Santiago cuando trabajaba como vendedora en una tienda de retail, especializada en productos de seguridad laboral. "Ganaba 400 mil pesos al mes, trabajando de lunes a viernes, de ocho a seis de la tarde. Era un trabajo agotador y con pocas recompensas", comentó. En paralelo, ya había comenzado a vender contenido privado a través de WhatsApp, pero nunca imaginó el salto que daría al entrar a Arsmate, conocida como el "OnlyFans chileno".
La idea de un perfil en una plataforma profesional surgió por recomendación de un seguidor, y al ver los resultados de su primer mes, supo que había encontrado una oportunidad única. “Cuando empecé, me hice 3 millones de pesos solo en el primer mes. No lo podía creer”, reveló con entusiasmo. Con el tiempo, sus ganancias se estabilizaron en alrededor de 1.500 dólares cada quince días, y la cifra sigue subiendo con las propinas y regalos que le dejan sus seguidores.
Isidora Valencia cautiva en redes sociales
Además de sus ingresos, Isidora Valencia ha logrado equilibrar su tiempo entre su trabajo en la plataforma y sus estudios de Ingeniería en Administración de Empresas. "No todo es contenido en la web. Sigo enfocada en mi formación profesional porque sé que quiero hacer más cosas en el futuro", expresó. Su objetivo es complementar su carrera con el éxito que ha obtenido en Arsmate, una combinación que le ha permitido ampliar sus horizontes y manejar sus propios tiempos.
Pese a la carga de trabajo, la joven no ha olvidado sus raíces ni a su familia. Desde Santiago, se organiza para ayudar a su madre, quien vive en Curacaví y depende del oxígeno para sus cuidados diarios. “Me divido entre mis actividades en la capital y las visitas a mi mamá. Quiero asegurarme de que ella esté bien y no le falte nada”, concluyó. Con su historia, Isidora demuestra que, con determinación y esfuerzo, es posible reinventarse y alcanzar nuevas metas.
