La noticia ha sacudido a quienes siguen con cariño los programas de citas, especialmente a los fanáticos de Amor a Ciegas, la versión chilena conducida por Cristián Riquelme en CHV. Sin embargo, el impacto cruzó fronteras, ya que la triste pérdida corresponde a una figura entrañable de la versión española First Dates, donde dejó una huella profunda por su valentía y su forma única de ver la vida.
Se trata de Loli Sánchez, una catalana de 51 años, que se hizo conocida por su participación en Amor a Ciegas. Su historia no fue la típica: más allá de buscar el amor, lo que transmitió fue un mensaje cargado de esperanza, humanidad y coraje. En televisión, se atrevió a contar que vivía con cáncer de útero desde hacía más de dos años, aunque mantenía la ilusión de encontrar “un novio eterno”, como ella misma dijo.
Loli no solo llegó a la pantalla con su ternura y sinceridad, también conquistó corazones con su actitud luminosa frente a la adversidad. “Aparentemente estoy bien, pero se ve que no”, confesó en el programa, dejando ver que su cuerpo luchaba en silencio mientras su espíritu se mantenía firme. Con una sonrisa tranquila y serena, también expresó: “Ahora disfruto cada segundo, cada minuto, porque el presente es un regalo”.
Dolor entre los fanáticos de Amor a Ciegas
Su manera de enfrentar la enfermedad inspiró a miles. No se trataba de esconder el dolor, sino de transformarlo. Cada una de sus palabras tenía un peso especial, como si supiera que su paso por el programa sería más que una búsqueda romántica, una lección de vida. Pero a pesar de toda su luz, la despedida fue especialmente dura: dejó un mensaje en TikTok que dejó un nudo en la garganta a muchos.
“Se termina. Espero que me entiendas bien y me respetéis. Gracias”, escribió en su última publicación, acompañada de una imagen que hablaba por sí sola. La tristeza se hizo sentir con fuerza en redes sociales, donde sus seguidores no han dejado de recordarla con cariño. Loli se fue con la misma honestidad con la que vivió y habló siempre: sin filtros, con verdad y con ese toque de ternura que la volvió inolvidable.
