Jordi Castell fue el invitado estelar del podcast "Quién es 1", donde, además de abordar temas de actualidad, sorprendió con una revelación personal. El fotógrafo desclasificó un desconocido romance que mantuvo hace más de dos décadas con el periodista José Miguel Villouta, describiéndolo como una experiencia traumática que lo llevó a tomar medidas drásticas.
La confesión se produjo cuando en el programa mencionaron el nombre de Villouta. De forma categórica, Jordi Castell afirmó: "no tengo nada bueno que decir de él". A continuación, reveló que su breve relación, que duró apenas dos meses entre 1999 y 2000, terminó con un grave incidente. Según su relato, el vínculo se convirtió en una "seguidilla de actos psicopáticos que terminaron llevándome a una comisaría para poner una orden de alejamiento".
El fotógrafo detalló que la situación le generó una gran sensación de vulnerabilidad y miedo. "Me sentí vulnerable porque yo en esa época vivía en la Plaza de las Lilas, en un edificio viejo que no tenía conserje y sentir en algún momento que podía ser un poco violento que alguien me hubiera estado esperando toda la tarde", relató. Castell también mencionó que su círculo cercano le advirtió sobre la actitud de Villouta. "Por lo que me dijo todo mi entorno, que por suerte me advirtieron a tiempo, que él, pues, pololeó mucho más conmigo que yo con él", sostuvo, dando cuenta de la intensidad y el acoso que supuestamente experimentó.
Jordi Castell y una confesión que se volvió viral
A pesar de la gravedad de sus declaraciones y del trauma que vivió, Castell cerró su relato con un mensaje que, si bien suena a buenos deseos, lleva consigo un matiz crítico. El fotógrafo le envió un mensaje a Villouta. "A lo que voy, no tengo nada bueno que decirte. Le deseo lo mejor, ojalá que le vaya bien. Que se recupere y que trabaje. Y que le vaya bien", expresó, deseándole éxito profesional.
Finalmente, el comunicador añadió un consejo final para su expareja. "Y ojalá que tenga controlado todos los excesos", cerró, dejando claro que, a pesar de los años transcurridos, los recuerdos de la relación aún lo afectan. El testimonio de Jordi Castell ha generado una gran polémica y ha puesto a ambos personajes en el ojo del huracán mediático.
