El caso que involucra al actor chileno Cristián Campos generó gran atención este jueves, luego de que el tribunal a cargo del proceso judicial decidiera sobreseerlo de manera total y definitiva. Campos había sido denunciado por Raffaella di Girolamo, hija de su exesposa, la reconocida actriz Claudia di Girolamo, quien lo acusó de haber cometido abusos sexuales cuando ella era menor de edad.
El fallo fue emitido por el Trigésimo Cuarto Juzgado del Crimen de Santiago, el cual determinó que los hechos denunciados efectivamente ocurrieron entre 1989 y 1995. Sin embargo, la resolución establece que la acción penal ya se encuentra prescrita, lo que impide que el actor pueda ser sancionado por la justicia chilena. En consecuencia, la causa fue cerrada de forma definitiva por extinción de la responsabilidad penal.
El juez encargado del caso dejó en claro que, si bien existe mérito suficiente para dar por acreditados los abusos denunciados, el paso del tiempo jugó un papel determinante en el desenlace judicial. La ley chilena que declara imprescriptibles los delitos sexuales contra menores fue promulgada recién en 2019, y no puede aplicarse retroactivamente a hechos cometidos décadas atrás.
Duras palabras de Raffaella di Girolamo
Ante esta resolución, Raffaella di Girolamo decidió expresarse públicamente por primera vez desde que hizo la denuncia. A través de su cuenta de Instagram, compartió una historia publicada por su prima Greta di Girolamo, donde se reflexiona sobre las limitaciones legales en torno a estos delitos. “En este marco legal y social de terror patriarcal, lo de Raffa di Girolamo y Fundación para la Confianza es un gran logro; el mejor escenario posible. Es, en medio de todo el horror, un abrazo”, dice el mensaje repostado.
En la misma publicación, Greta manifestó su frustración por la imposibilidad de una condena formal: “Da rabia que el fallo no lo declare culpable y que quede impune”. A esto añadió: “Pero es porque cuando se cometió el delito, todavía no existía la ley (de 2019) que declara imprescriptible el abuso sexual a niñxs y adolescentes”. Las palabras de Raffaella di Girolamo reflejan el sentir de muchas víctimas que ven cómo la justicia reconoce los hechos, pero no puede castigar a los responsables debido a vacíos legales del pasado.
