El veterinario y comunicador Sebastián “Lindorfo” Jiménez fue el invitado especial del programa “Al piano con Lucho”, donde compartió una conversación íntima con el conductor Luis Jara. Durante la entrevista, abordó distintos aspectos de su vida profesional y personal, revelando detalles de su separación tras 17 años de matrimonio y cómo ha evolucionado su relación con la madre de sus hijos.
Consultado sobre el quiebre, Sebastián “Lindorfo” Jiménez reflexionó sobre la convivencia y las dificultades que enfrentaron como pareja. “La convivencia es muy compleja, y hay momentos en los que te das cuenta de que ya no puedes seguir viviendo con esa persona porque los roces son constantes”, comentó. Sin embargo, destacó que este proceso le permitió aprender mucho y tomar las mejores decisiones para su bienestar y el de su familia.
El comunicador subrayó que, a pesar de la separación, actualmente mantiene una excelente relación con su exesposa, lo que ha sido fundamental para sus hijos. “Nos llevamos muy bien, de hecho, este verano vamos a salir de vacaciones juntos. Ella me invita, yo la invito, y lo hacemos por el bien de todos”, aseguró, mostrando que, aunque ya no están como pareja, el respeto y la cordialidad se mantienen intactos.
Sebastián “Lindorfo” Jiménez y su separación
En la charla, Lindorfo también se refirió a cómo el quiebre afectó a sus hijos y cómo finalmente se dieron cuenta de que la separación era lo mejor. “Los niños lo estaban pasando mal cuando estábamos juntos, y eso fue lo más difícil para nosotros. A veces pensamos que debemos mantenernos unidos para que no sufran, pero en realidad estaban sufriendo más así”, confesó. Con esto, quiso dejar en claro que, a veces, alejarse es la mejor forma de cuidar a los más pequeños.
Para concluir, Sebastián “Lindorfo” Jiménez compartió una lección que le cambió la perspectiva sobre las relaciones de pareja: “Lo más importante en el matrimonio son ustedes dos, no los hijos. Si la pareja está bien, todo lo demás estará bien”, reflexionó, señalando que este consejo fue clave para entender que la felicidad de ambos era primordial para el bienestar familiar.
