En las últimas horas, las redes sociales se han visto inundadas de comentarios y reacciones tras la revelación del periodista Andrés Caniulef, quien confesó que hace ocho años fue diagnosticado con VIH. El comunicador aseguró que su condición es “indetectable e intransmisible”, lo que significa que puede llevar una vida normal sin riesgo de transmitir el virus. Sin embargo, sus declaraciones han desatado un intenso debate en torno a la responsabilidad de informar a las parejas sobre este tipo de diagnósticos.
Una de las reacciones más fuertes provino de Sergio Rojas, conductor del programa Que te lo digo, quien mantuvo una relación fugaz con Andrés Caniulef en 2022. Rojas no ocultó su enojo al enterarse de la noticia en vivo durante su espacio televisivo. “¿Puedo decir algo? Esto es muy serio. Me parece una irresponsabilidad brutal, y te lo digo con todo el cariño del mundo, Andrés. Te voy a mandar un audio cuando termine el programa”, expresó Rojas, quien además criticó la decisión de Caniulef de no haber compartido su diagnóstico antes. “Cuando uno tiene una relación con alguien, debe, por humanidad, informarle. No puede pasar años sin decirlo y luego justificarse diciendo que no había riesgo”, agregó.
Frente a estas críticas, Caniulef respondió a través de una extensa publicación en sus redes sociales, donde defendió su decisión de mantener en privado su diagnóstico durante tanto tiempo. “Este es un tema muy íntimo y personal. Nadie está obligado a compartirlo, y si yo lo hago ahora es porque quiero ayudar a erradicar el miedo y la vergüenza que muchos sienten al enfrentarse a esta situación”, explicó. El periodista también reflexionó sobre su propia experiencia: “El miedo me paralizó y eso puso en riesgo mi salud. Lo que mata no es el VIH, sino el miedo, la desinformación y el estigma”.
Andrés Caniulef y su indirecta a Sergio Rojas
Además, Caniulef enfatizó que su mensaje principal es que vivir con VIH no significa el fin de la vida. “Si te contagias de VIH, la vida no se detiene. Sigue su curso normal”, afirmó. Sin mencionar directamente a Rojas, el periodista también abordó las críticas sobre su supuesta falta de transparencia: “Este diagnóstico es privado y personal. Si alguien cree que debí sincerarme antes, está cayendo en un sentimiento mezquino y egoísta. Hoy entiendo que aliviar el camino de otros también ayuda a aliviar el tuyo”.
La polémica ha abierto un diálogo necesario sobre el estigma que aún rodea al VIH y la importancia de la educación y la empatía en estos casos. Mientras algunos apoyan la postura de Andrés Caniulef y su derecho a la privacidad, otros, como Rojas, insisten en la responsabilidad de informar a las parejas sexuales. El debate sigue abierto, y sin duda, esta confesión ha puesto sobre la mesa un tema que requiere mayor visibilidad y comprensión.
