En el Centro Penitenciario Femenino de San Miguel, Cathy Barriga pasó sus primeras horas en el Módulo 2, donde comparte espacio con otras 16 internas. Entre ellas, la abogada Leonarda Villalobos fue la primera en recibirla, brindándole apoyo en un momento en que la exalcaldesa llegó visiblemente afectada y vulnerable. Villalobos no solo le dio la bienvenida, sino que también le mostró las instalaciones, incluyendo los casilleros y el baño compartido.
Cathy Barriga, conocida por su rol como exalcaldesa de Maipú, se mostró preocupada por la situación de su hijo menor, quien padece autismo. Durante las interacciones con las otras internas, comentó con ansiedad que ella es la encargada de toda la rutina diaria del niño, desde la mañana hasta la noche. Esta preocupación la llevó a compartir su temor sobre posibles descompensaciones que pudiera sufrir su hijo ante su ausencia.
Las fuentes cercanas al caso indicaron que Barriga, aunque golpeada emocionalmente por su situación, fue capaz de adaptarse y cenar sin mayores inconvenientes durante su primera noche. Su actitud reflejaba una mezcla de preocupación por su familia y adaptación al nuevo entorno penitenciario, donde busca mantener la calma.
Cathy Barriga y su presente tras las rejas
Las próximas visitas están programadas para comenzar el viernes 15 de noviembre, lo que trae esperanza a Cathy Barriga de reencontrarse con su familia. Su esposo, Joaquín Lavín León, ya se ha inscrito en el registro de visitas y se espera que sea el primero en verla y brindarle apoyo en este difícil momento.
La situación de la exalcaldesa continúa atrayendo la atención pública, mientras se enfrenta a un proceso de adaptación que, si bien ha comenzado de forma tranquila, sigue marcado por la incertidumbre y la preocupación por el bienestar de su hijo.
