Rafael Poblete, representante legal de los familiares de los pescadores desaparecidos de la embarcación Bruma, dio a conocer un dato crucial en la pesquisa, el cual apunta directamente a los tripulantes del buque Cobra. La información fue compartida durante una entrevista en el programa Mucho Gusto, poco después de confirmarse el descubrimiento de un cuerpo que podría ser el de Juan Sanhueza, el vigía cuya declaración era clave para esclarecer los hechos.
El jurista aseguró que no estaba violando el secreto de la investigación al revelar este avance: "Puedo adelantarlo como primicia... en este punto no estoy quebrantando la confidencialidad del caso. Les confirmo un dato extremadamente relevante en esta verdadera trama policial", declaró Poblete con firmeza.
Previamente, el abogado de los familiares de pescadores había detallado que, según el Código Procesal Penal, la requisa de teléfonos solo está permitida en tres circunstancias graves: narcotráfico, actos terroristas o cuando existe indicio de entorpecimiento a la justicia. Este último escenario sería el aplicable en la investigación.
¿Qué ocurrió con los pescadores desaparecidos?
Poblete confirmó que las autoridades ya ordenaron la incautación de los dispositivos móviles de los 18 tripulantes del Cobra. "Todos tuvieron que entregar sus teléfonos. Si hubo comunicación entre ellos después de la tragedia, la verdad se conocerá", afirmó. Este paso refuerza la hipótesis de que podrían existir intentos de manipulación de la investigación.
El hallazgo del cuerpo, sumado a esta nueva información, marca un giro en el caso, mientras los familiares de los pescadores desaparecidos esperan respuestas concretas. Las próximas horas serán decisivas para determinar si las pruebas tecnológicas aportarán las piezas faltantes en este complejo rompecabezas judicial.