El martes 15 de octubre, el exsubsecretario Manuel Monsalve entregó voluntariamente su celular a las autoridades, como parte de la investigación por la denuncia de violación en su contra. Según informó La Tercera PM, esa misma noche dio su primera declaración a los investigadores y accedió a un examen de ADN. Días después, el jueves, cuando presentó su renuncia en La Moneda, se le vio utilizando un nuevo dispositivo móvil.
El caso tomó un giro inesperado el viernes 18 de octubre, cuando las autoridades realizaron un allanamiento en el domicilio de Manuel Monsalve en Santiago, donde se había quedado para colaborar con la investigación. Durante esta diligencia, la policía hizo un descubrimiento no previsto: un tercer celular que no estaba en el radar del Ministerio Público. Este dispositivo fue incautado gracias a una ampliación de la orden judicial.
Tras el allanamiento, Monsalve informó rápidamente a su equipo de defensa, liderado por la abogada María Inés Horvitz, sobre lo sucedido. Horvitz mostró su descontento ante lo que consideró un procedimiento irregular y presentó una cautela de garantía ante el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, acusando violaciones al debido proceso en el manejo del caso. La audiencia para discutir esta acción legal está programada para el miércoles a las 09:00 horas.
¿Qué ocurrirá con Manuel Monsalve?
Ante las dudas generadas por la incautación del tercer celular, el Ministerio Público decidió no acceder al contenido del dispositivo. En lugar de ello, optó por dejarlo bajo custodia del tribunal, a la espera de la resolución judicial. Esto asegura que el teléfono no será manipulado sin una orden expresa de la justicia.
El desarrollo de este caso sigue generando tensiones, con el foco puesto tanto en las acciones de la defensa de Manuel Monsalve como en la actuación de las autoridades judiciales y policiales, que deberán decidir en las próximas horas sobre el futuro del dispositivo incautado y el avance de la investigación.