Federico Koch, esposo de Eliana Albasetti, contó detalles del robo que sufrieron en su "Santuario Empatía", donde un grupo de delincuentes sustrajeron a Pepe Bruno, un cordero que habían rescatado hace un año y que era parte de su refugio para animales.
El hecho ocurrió la madrugada del jueves y tras lo sucedido la ex chica reality pidió ayuda en sus redes sociales, mientras esperaba la llegada de la policía. "Gente, por favor, necesito que viralicen esto, nos entraron a robar (...) Se querían llevar a las vacas, rompieron todo, las mallas, y nos robaron a Pepe Bruno, nos robaron a un cordero que salvamos hace un año y medio", dijo Eliana Albasetti.
Ahora, su esposo contó detalles sobre el robo que sufrieron, señalando que no bajarán los brazos en la búsqueda de Pepe Bruno y revelando que tanto su esposa como su hija de 11 años están emocionalmente muy afectadas.
"La Eli no está bien, por eso no está acá conmigo, ella está mucho más afectada que yo, por ahí soy un poco de mente más fría y ella es mucho más de piel, mucho más de sentimientos y efectivamente esto por ahí ella la tiene más consternada que a mí", partió diciendo Koch.
Luego, explicó que ellos viven en una parcela y que, entre su terreno y la ruta, hay otra parcela, pero que aún no se ha construido ahí, por lo que los ladrones rompieron un perímetro e ingresaron directamente al santuario. Entonces, los sujetos "estacionaron el auto en la ruta, se bajaron, rompieron un cerco perimetral que tiene la ruta como para dividir la ruta de lo que es el comienzo de nuestra parcelación, como el cerco perimetral de toda la parcelación, caminaron los 120 metros y se metieron directo a nuestra parcela, como lo comentamos ya en innumerables veces, esto fue premeditado, no fue coincidencia".
Por último, Federico Koch expuso que el robo fue descubierto por su hija mayor: "Una nena de 11 años tuvo que mirar frente a frente y a los ojos a una persona que está intentando robarse sus vacas y a ella todavía le cuesta, está durmiendo con nosotros obviamente porque tiene miedo, porque lo vio ella en su ventana, para los que no saben o no conocen el santuario, la ventana de mi hija da literalmente a 15 metros del corral de las vacas".
"Es una mierda, nos robaron un familiar, nos robaron parte de la familia", lamentó.
