La investigación en torno a la enigmática desaparición de María Elcira Contreras, la adulta mayor de 86 años cuyo rastro se perdió el 12 de mayo de 2024, ha tomado un giro significativo. Un reciente reportaje de Mega reveló que un informe de la Brigada de Investigación Criminal (BICRIM) de la PDI ha corroborado una sospecha que la familia de María Elcira mantenía desde hace meses: la existencia de videos eliminados.
El documento policial establece que los registros de las cámaras de seguridad del Fundo Las Tórtolas, en Limache, lugar donde María Elcira fue vista por última vez, fueron suprimidos precisamente el día de su desaparición. El análisis forense, llevado a cabo por una unidad del LACRIM en Temuco, detalla: “No fue posible recuperar archivos de video inaccesibles (eliminados) de fecha 12 ó 13 de mayo de 2024, como asimismo no fue posible encontrar registros de acceso, utilización o cambios de la configuración del DVR anteriores al 12.SEP.024”.
Ante estos resultados, el abogado querellante, Juan Carlos Manríquez, enfatizó la gravedad de la situación. Según explicó, "lo que dice este informe es que los archivos eliminados son irrecuperables por la forma en que se eliminaron desde el 12 de mayo hasta septiembre de aquel año”. Este hallazgo plantea interrogantes fundamentales sobre lo ocurrido.
María Elcira y una novedad que hacer ruido
Manríquez profundizó en las implicaciones de este descubrimiento: “En consecuencia, lo que cabe preguntarse ahora es quién los eliminó, por qué los eliminó, por orden de quién y qué mecanismo se utilizó para eliminarlo de manera irrecuperable". El abogado subrayó que esta situación abre la puerta a la presentación de una acción legal por "obstrucción a la investigación" y "eliminación de evidencia", dado el carácter crucial de los registros.
Finalmente, en declaraciones al medio citado, el abogado Manríquez calificó el hecho como “una acción altamente sospechosa y muy grave”, especialmente "sabiendo lo importante que era" la información contenida en esos videos para esclarecer la desaparición de María Elcira Contreras. Este nuevo antecedente inyecta una dosis de misterio y complejidad adicional a un caso que ha mantenido en vilo a la opinión pública durante meses.
