Las deplorables escenas de violencia ocurridas durante el partido entre Independiente y Universidad de Chile por la Copa Sudamericana han generado fuertes acusaciones. Juan Manuel Lugones, extitular de la Aprevide (Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte), ha denunciado una supuesta complicidad entre la policía de Buenos Aires y la barra de Independiente para atacar a los hinchas del equipo chileno.
En una entrevista con Radio La Red de Argentina, Lugones afirmó que el personal de seguridad habría permitido el acceso de los barristas trasandinos al sector reservado para los visitantes. Según él, la policía no mostró la capacidad profesional para intervenir o simplemente tomó la decisión de no hacerlo. "Lo que nos mostraron ayer, con la crudeza que vimos todos, es que la Policía no tiene la capacidad profesional, o tomaron la decisión de no hacerlo, de meterse a la tribuna a terminar con los problemas", declaró.
El extitular de Aprevide fue más allá en su acusación, señalando que los hechos evidencian un acuerdo preexistente. "Al contrario, demostraron que tienen un acuerdo con la barra para liberar la zona y que la barra haga de barreminas", añadió Lugones. Insistió en su punto, destacando que "vimos a un sector de la barra de Independiente ingresar ayer a pegarle a un sector de la gente de U de Chile con la autorización de la Policía de la provincia de Buenos Aires, que libera la zona para que entren".
Duras críticas a la policía de Buenos Aires
Lugones también mencionó una presunta corrupción, aludiendo a la existencia de un arreglo económico. "En Avellaneda no se vende una bondiola sin que una parte vaya a la unidad policial", sostuvo, responsabilizando directamente a los agentes de seguridad. Con estas declaraciones, el exfuncionario de seguridad deportiva apunta a una red de complicidad que habría facilitado los actos violentos.
Para concluir, el exjefe de Aprevide subrayó que no es cierto que la policía no pueda ingresar a una tribuna, ya que es una decisión operativa. Además, en base a las reglas de la Conmebol, endosó la principal responsabilidad a Independiente por lo ocurrido. “Según las reglas de Conmebol, el responsable de seguridad es Independiente”, cerró Lugones, dejando en claro que el club argentino también tiene culpa en los incidentes.
