En una reveladora entrevista en el programa Only Friends, Mauricio Correa, exdirector de Buenos Días a Todos, confesó una anécdota desconocida sobre su relación con el fallecido animador Felipe Camiroaga. Correa admitió haberse peleado físicamente con Camiroaga, en un incidente que, según su relato, fue el resultado de la intensa presión por el rating televisivo.
La confesión de Correa se produjo cuando la inteligencia artificial del programa le preguntó directamente: “¿Es verdad que una vez te peleaste con Felipe Camiroaga y te dejó knockout?”. Sin dudarlo, el exdirector respondió: “Sí, es verdad. Dos veces me noqueó”. Según su relato, la confrontación ocurrió durante una época de fuerte competencia entre el matinal y el programa Mekano. En un intento por subir la sintonía, el equipo de producción decidió lanzar un segundo disco con los animadores caracterizados como diferentes personajes, como “Señorita Andrea” y “Washington”.
El conflicto se desencadenó cuando Correa decidió, en un intento por aumentar el rating, mostrar por primera vez en televisión a Patricio Frez, la voz histórica de Canal 13. Esta movida, que logró subir la sintonía en un par de puntos, generó la furia de Camiroaga. Correa admitió que se equivocó, ya que su estrategia relegó la presentación del disco y el show de los animadores a un segundo plano.
Viral dato sobre Felipe Camiroaga
Según el exdirector, la confrontación se produjo durante una pausa comercial. "Nos vamos a comerciales, sube Felipe a la sala de dirección. ‘Sale de ahí, te voy a sacar la cresta’, me dice. (Yo le digo) ‘Felipe, espérame en el camarín que voy en 10 minutos’, esperando que él se calmara”, narró Correa. Sin embargo, cuando llegó al camerino, se encontró con un Camiroaga furioso, que incluso intentó lanzarle un cenicero.
El enfrentamiento escaló a una pelea física, con ambos forcejeando. "Yo lo tacleo y de repente siento a la Karen diciendo ‘ayuda, están peleando’. Y llegó gente del canal a separarnos”, relató. Correa reconoció que el enojo de Felipe Camiroaga estaba justificado, ya que su decisión hizo que la presentación de “su disco y su presentación” pasaran a un segundo plano, evidenciando el nivel de estrés y la presión que se vivía en el mundo de la televisión.
