Un grave incidente de violencia se registró al interior del penal Santiago 1, donde un grupo de internos atacó con fuego la celda que alberga a los dos delincuentes formalizados por la muerte de un niño en la comuna de Recoleta. Los imputados, identificados como Iván Esteban Gómez Obreque (28) y Claudio Enrique Gaete Quiroz (31), se encuentran actualmente aislados tras ser enviados a prisión preventiva este martes, como medida cautelar por el impacto del caso.
Gómez Obreque y Gaete Quiroz son los responsables de la muerte ocurrida el lunes pasado, al conducir el automóvil que colisionó violentamente contra un furgón escolar. Por estos hechos, fueron formalizados por un homicidio consumado y siete homicidios frustrados, además de otros delitos. Debido a la alta notoriedad del caso y para salvaguardar su integridad física, el tribunal había ordenado que los sujetos quedaran en la cárcel con medidas especiales de protección.
Pese a las medidas de seguridad, Tele13 informó que se filtraron registros audiovisuales que evidencian el hostigamiento de otros internos del recinto penitenciario. Los videos muestran a los reclusos desde el exterior de la celda de aislamiento de los imputados, profiriendo amenazas, insultos y desafiándolos a salir para enfrentarse a ellos en el patio.
Fuerte ataque contra los imputados por la muerte del escolar
El acoso verbal escaló a un ataque con un artefacto incendiario. En una de las secuencias filtradas, se observa cómo primero vacían el líquido de una botella por la ventanilla de la celda. Luego, se ve a los agresores llenar una bolsa con papeles y trozos de plástico, prenderle fuego y arrojarla encendida hacia el interior de la dependencia donde se encontraban Gómez y Gaete, quienes ocasionaron la muerte del escolar.
Las imágenes posteriores al ataque exhiben el interior de la celda lleno de humo, mientras se escuchan los gritos amenazantes de los reos, cuya intención de causar daño era clara. En el registro se oye a los internos gritar: “¡Vamos a quemarlos vivos!”, lo que subraya la extrema gravedad de la agresión sufrida por los imputados que esperan el término de la investigación tras las rejas.
