La inquietante desaparición de la concejala María Ignacia González, de 73 años, ha sumido a la pequeña comuna de Villa Alegre en una profunda incertidumbre. Después de diez días de búsqueda infructuosa, su familia ha decidido romper el silencio. Javiera Gallegos, hija de la edil, ofreció una conmovedora entrevista a Súbela Radio, revelando el drama familiar y exponiendo su propia teoría sobre el caso que mantiene en vilo a la región.
"Estamos desesperados. Las hijas, la familia... estamos todos desesperados. Imagínense, Villa Alegre es un pueblo muy chico, muy tranquilo, nunca pasa nada y de pronto, mi mamá desaparece", expresó Gallegos, reflejando la angustia que viven. La concejala fue vista por última vez la madrugada del 15 de junio, en medio de un sistema frontal, cuando se dirigía hacia el sector La Balsa, cercano al río Loncomilla, área donde se ha concentrado la búsqueda sin resultados. "Ya van diez días y no hay absolutamente ningún rastro", lamentó la joven.
Desde el inicio de la investigación, cercanos a María Ignacia habían planteado la posibilidad de la intervención de terceros en su desaparición. Incluso se mencionó que la concejala se había sumado recientemente a una denuncia en el ámbito político, un antecedente que se maneja como parte de la investigación. Sin embargo, Javiera Gallegos fue más allá, apuntando directamente a un eventual crimen y articulando una teoría que apunta a un "femicidio de carácter político".
Dolor y angustia en la familia de la concejala desaparecida
"Yo tengo sospechas para pensar que a ella la desaparecieron, a esta altura. También tengo sospechas para pensar que esto se trata de un femicidio de carácter político. Mi mamá siempre hizo un trabajo muy potente en un rol fiscalizador, y creo que eso ahora le jugó en contra", manifestó la hija con convicción. Aunque no pudo confirmar la existencia de amenazas previas, sí dejó claro que su madre "estuvo liderando una investigación en contra de la anterior administración" y que impulsó "muchas más" indagatorias en su rol fiscalizador.
La visión de Javiera es que el incisivo trabajo de su madre pudo haber generado resentimientos. Había "muchas personas que no estaban contentas con su presencia", indicó, sugiriendo que su rol activo en la fiscalización política podría haberla puesto en una situación de riesgo. La familia de la concejala clama por respuestas y que se exploren todas las hipótesis en esta enigmática desaparición que ha conmocionado a toda una comunidad.
