Jacqueline, la madre de Francisco Albornoz, decidió hablar públicamente por primera vez luego del trágico desenlace de la desaparición de su hijo. El joven farmacéutico, de apenas 21 años, estuvo perdido por casi dos semanas, generando una intensa búsqueda por parte de su familia y amigos. Finalmente, su cuerpo fue encontrado en San Fernando, en la Región de O’Higgins, lejos de su hogar en la comuna de Santiago, lo que dejó más preguntas que respuestas.
Hasta ahora, las autoridades confirmaron la detención de dos personas vinculadas al caso. Según los primeros antecedentes, ambos sospechosos habrían conocido a Francisco Albornoz a través de redes sociales, lo que refuerza la hipótesis de que su desaparición no fue accidental. La investigación sigue su curso, mientras la familia espera respuestas más claras y justicia para su hijo.
En una entrevista con el matinal Contigo en la mañana, Jacqueline expresó con firmeza su deseo de que se haga justicia. “Quiero que se haga justicia por el hecho de que las condiciones en las que se encontró a Francisco no deberían pasar”, señaló, visiblemente afectada. También pidió más empatía y rapidez por parte del sistema judicial. “Yo quiero hablar para que esto no suceda más y que la justicia sea más empática y no esperar tanto tiempo (para actuar)”, agregó.
Sigue la investigación en el caso de Francisco Albornoz
La madre de Francisco Albornoz también reconoció que durante los días más intensos de la búsqueda, sus hijas trataron de protegerla manteniéndola un poco al margen de la situación. Sin embargo, destacó el rol que jugó la prensa en visibilizar el caso. “Gracias a la prensa esto se magnificó y creo que sirvió mucho para que estas personas tuvieran presión y se entregaran”, explicó, agradecida por el apoyo que recibió desde distintos sectores.
Jacqueline también habló desde el corazón al recordar a su hijo, a quien describió como un joven alegre, responsable y con un estilo muy particular. “Era muy alegre, trabajador, cuidadoso de andar bonito, era como pituquito”, contó con ternura. Y aprovechó para dejar un mensaje a otros jóvenes: la importancia de compartir su ubicación y mantener informados a sus seres queridos. “Francisco no dio esa información, entonces no sabíamos con qué amigos andaba”, lamentó, con la esperanza de que su experiencia evite futuros casos similares.