Con la reciente asunción de Javier Milei como presidente en Argentina, el país experimentó una serie de medidas económicas dirigidas a hacer frente a la "peor herencia de nuestra historia", según expresó Luis Caputo, el nuevo ministro de Economía. En un esfuerzo por evitar una hiperinflación, se anunció una devaluación del 54% del peso argentino, estableciendo el tipo de cambio oficial del dólar de $366 a $800 pesos argentinos.
Estas medidas también incluyen un aumento provisional del impuesto país a las exportaciones y a las retenciones de las exportaciones no agropecuarias, con la promesa de eliminar todos los derechos de exportación una vez que concluya la emergencia. El objetivo central del gobierno es recortar el gasto en un 2,9% del PIB mediante un ajuste fiscal radical.
Aunque Bloomberg informó que el Fondo Monetario Internacional (FMI) recibió positivamente estas medidas, se espera que el Banco Central argentino anuncie otras iniciativas monetarias en las próximas horas. En cuanto al impacto en Chile, la devaluación del peso argentino no genera un impacto significativo en la economía chilena. Aunque algunos productos e importaciones pueden experimentar aumentos de precio, el poder adquisitivo del peso chileno sigue siendo superior al argentino.
Nuevas medidas de Javier Milei
Esta situación no es nueva para Chile, ya que hace dos meses, durante el derrumbe de la moneda argentina, también se observó una disminución en su valor en comparación con el peso chileno, como resultado de las medidas implementadas por el expresidente Alberto Fernández. Con las nuevas medidas de Javier Milei, hay movimientos rápidos en la economía.
Es importante señalar que se descongelaron los acuerdos previos con empresas proveedoras de alimentos y bienes, lo que llevó a la actualización de listas de precios con aumentos de hasta un 50 o 60%. Estos incrementos podrían afectar el llamado "turismo de supermercado" de los chilenos en destinos como Mendoza y otros lugares.
