El diputado Sergio Bobadilla (UDI) ha sido objeto de múltiples críticas a raíz de un comentario considerado inoportuno sobre la reciente alerta de tsunami que mantuvo en vilo a todo Chile. El incidente ocurrió alrededor de las 8:00 de la mañana, mientras el país se enteraba de la Alerta Roja a nivel nacional, momento en que el congresista publicó un mensaje en la red social X (anteriormente Twitter).
El legislador por la Región del Biobío escribió: “Bachelet dice que ya pueden regresar a sus casas”. Este posteo, interpretado como una supuesta broma, recibió un mínimo de apoyo, pero fue abrumadoramente superado por el repudio. Las críticas se centraron en la percepción de que el diputado estaba "jugando" con la memoria de la tragedia del terremoto y tsunami de 2010, un evento donde negligencias reconocidas por las autoridades causaron la pérdida de numerosas vidas.
Diversas voces manifestaron su desaprobación ante el comentario de Bobadilla. Camilo Riffo (FA), excandidato a alcalde de Concepción, cuestionó: “Señor diputado, en una alerta de tsunami, la prioridad de una autoridad debe ser informar y entregar calma, no hacer política con el miedo de la gente, ni tomárselo para la chacota”. Un contador auditor del Maule, en la misma red social, añadió: “Este señor es un irresponsable. Contraloría debería poder hacer algo con este tipo cosas, en momentos donde la autoridad y política debería llamar a la calma”.
Polémica broma por el Tsunami
Otros usuarios de la plataforma se sumaron a la oleada de quejas, expresando su indignación en un tono similar. Comentarios como “Miren lo que escribe el honorable diputado, no puede ser más miserable” y “Triste ver a una autoridad tomándose para chiste la situación ¿sabrá lo que es la violencia mediante revictimización?” reflejan el malestar generalizado ante la publicación de Bobadilla en un momento de sensibilidad nacional.
La controversia destaca la expectativa pública de un comportamiento serio y responsable por parte de las autoridades, especialmente durante emergencias. El incidente subraya el impacto que pueden tener las declaraciones de figuras públicas en las redes sociales y la rápida reacción de la ciudadanía ante lo que se percibe como falta de empatía o trivialización de situaciones graves.
