El macabro crimen de Rosa Valenzuela, una adulta mayor cuyo cuerpo fue encontrado sin vida dentro de una maleta en el patio de su propia casa en Recoleta, continúa generando un profundo impacto. La mujer, que había sido vista por última vez el viernes 4 de julio, fue hallada dos días después. La conmoción en la comunidad se intensificó este martes, cuando su hija, Karina Prida, fue formalizada y quedó en prisión preventiva como única imputada en el caso.
Durante la audiencia, nuevos antecedentes salieron a la luz, apuntando a conductas sospechosas por parte de Prida, como la presencia de tierra en sus manos y una compra que levantó dudas. Mientras la investigación avanza, los testimonios de vecinos y cercanos a la adulta mayor han comenzado a pintar un cuadro de la compleja relación entre madre e hija, marcada por la violencia y el consumo de drogas.
En conversación con el programa La Tarde es Nuestra de Canal 13, una amiga cercana de Rosa describió a la víctima como una mujer "muy buena amiga, muy alegre, muy mamá, muy abuelita", destacando su espíritu solidario y compromiso con la comunidad. Sin embargo, también reveló que Rosa había sido inmensamente paciente con su hija, a pesar de los constantes episodios de agresión y su adicción a las drogas.
Sigue la conmoción en el caso de la adulta mayor hallada en Recoleta
La vecina relató la preocupación que sentían por Rosa: "Nunca le tuvo miedo. Nos decía: ‘yo la enfrento acá, no me hará nada’. Pero siempre le decíamos: ‘Rosita, no tenga a su hija acá’. Se iba, volvía, porque siempre andaba en su droga y a la Rosita la tenía intranquila". A pesar de haberla echado de casa en varias ocasiones por actitudes agresivas y entradas intempestivas de madrugada, Rosa siempre la mantenía cerca, en un intento desesperado por proteger a su hija. "Ella, como mamá, vamos a perdonar a nuestros hijos, sean malos o buenos; pero ella colmó la paciencia, fue muy mala con la Rosita", lamentó la amiga.
El testimonio de la vecina evidencia la dolorosa dinámica familiar: "En otras ocasiones le alzaba la voz a la Rosita y se daba cuenta que estábamos nosotros, pero era la droga la que la tenía así". El brutal asesinato de la adulta mayor ha conmocionado profundamente a Recoleta, mientras la Fiscalía continúa reuniendo pruebas para esclarecer los hechos y determinar las responsabilidades en este trágico suceso.