La nieta de María Elcira, una mujer identificada como Hernández, reveló cómo una simple broma familiar derivó en una serie de complicaciones y malentendidos que incluso involucraron a las autoridades. Según explicó, su esposo bautizó a su cuñado como el "narco-pololo" tras ver una serie de Netflix relacionada con el mundo de las drogas. Sin embargo, aclaró que el apodo no tenía ninguna relación con actividades ilícitas, sino que surgió por el gusto de su cuñado por los automóviles. "Fue algo dicho en tono de broma, nada más", aseguró.
Hernández lamentó que la conversación en la que se mencionó el apodo fuera sacada de contexto. "Es una charla que se malinterpretó por completo. Ni siquiera recuerdo bien el contexto en el que se dio esa plática", expresó. Además, reconoció que este episodio generó tensiones dentro de la familia, al punto de que su esposo tuvo que disculparse con su cuñado para aclarar que no había intención de ofenderlo.
La nieta de María Elcira también compartió que su cuñado lleva aproximadamente tres años formando parte de la familia. En medio de la confusión, surgió una teoría conspirativa entre ellos: creen que, debido a la buena situación económica de su cuñado, alguien podría haberlo seguido o investigado. "Fue una idea que surgió en un momento de desesperación, porque no teníamos respuestas claras sobre lo que estaba pasando", relató.
Siguen las dudas en el caso de María Elcira
Ante la pregunta de si su cuñado había estado involucrado en actividades relacionadas con el narcotráfico, Hernández fue categórica: "No, eso no es así. No tiene nada que ver con eso". Además, detalló que tanto ella como su esposo y otros miembros de la familia declararon ante la Policía de Investigaciones para aclarar la situación y dejar en evidencia que no había fundamento alguno para tales sospechas.
Este incidente, que comenzó como una broma intrascendente, terminó por convertirse en un episodio incómodo y estresante para la familia de María Elcira. Hernández hizo hincapié en la importancia de no sacar conclusiones apresuradas y de entender el contexto completo de las conversaciones antes de juzgar. "Fue una situación difícil, pero quedó claro que todo fue un malentendido", concluyó.