La reconocida actriz chilena Paulina Urrutia, quien enfrenta con valentía un diagnóstico de cáncer de mama, ha encontrado en los últimos años un nuevo propósito más allá de los escenarios. A sus 56 años, ha explorado el mundo del coaching emocional y la participación en charlas, compartiendo su perspectiva sobre la vida, el amor y la enfermedad. Su presencia en eventos culturales, como el reciente Festival Puerto de Ideas en Antofagasta, demuestra su compromiso con la reflexión colectiva.
Durante su intervención en el festival, Paulina Urrutia abordó el tema de las emociones con una sinceridad conmovedora. "No soy el símbolo de la felicidad de Chile, ¿verdad? Más bien, me ven como 'la viuda de Chile'", expresó con ironía, según registró The Clinic. Además, participó en un conversatorio sobre el Alzheimer, donde recordó a su esposo, Augusto Góngora, fallecido a causa de esta enfermedad. Su relato sobre los cuidados que le brindó hasta el final evidenció tanto su dolor como su fortaleza.
En medio de estas reflexiones, la actriz también habló sobre su lucha contra el cáncer y cómo ha enfrentado comentarios insensibles. "Lo más duro ha sido escuchar cosas como: 'Usted ha sufrido tanto que era lógico que le diera cáncer'. Como si el dolor fuera un castigo o una deuda", compartió. Con firmeza, cuestionó esta visión: "Todos sufrimos. Si fuera así, todos tendríamos cáncer. La sanación no siempre es posible, y la muerte también es parte de la existencia".
Paulina Urrutia y una dura batalla
A pesar de su pausa actoral, Urrutia sigue conectada al mundo del espectáculo a través de proyectos filmados antes de su diagnóstico, como Baby Bandito (2024) y la próxima película Isla Negra (2025). "Es curioso, porque aunque me tomé un descanso, trabajos anteriores siguen saliendo. Es como si tuvieran vida propia", comentó. Paralelamente, encontró satisfacción en talleres y charlas, actividades que, según dijo, le generan gran felicidad y propósito.
Sobre un posible regreso a la actuación, Paulina Urrutia fue clara: "Estoy en recuperación y debo respetar este proceso. No es que no quiera, sino que debo esperar el momento adecuado". Sin embargo, confesó que hay propuestas, especialmente en teatro, que la entusiasman. "Hoy vivo guiada por el anhelo. El amor es lo que nos impulsa a seguir, no en un sentido romántico, sino como energía vital. Y aquí estoy, dándole con todo", concluyó, dejando en evidencia su espíritu indomable.
