El presidente de Chile, Gabriel Boric, protagonizó un emotivo momento en Uruguay al asistir al velorio del expresidente José "Pepe" Mujica, referente histórico de la izquierda en América Latina. Su llegada al Palacio Legislativo de Montevideo este jueves no pasó desapercibida, siendo el primer jefe de Estado extranjero en presentarse para rendir tributo al fallecido líder.
Acompañado por el presidente uruguayo Yamandú Orsi, Gabriel Boric hizo una pausa al ingresar al recinto para saludar con entusiasmo a un compatriota chileno que portaba una bandera magallánica. El gesto fue espontáneo y cálido, y captó la atención de quienes se encontraban presentes, marcando un contraste entre la solemnidad del evento y el vínculo afectivo del mandatario con su gente.
Medios uruguayos reportaron que la llegada de Boric generó un breve cierre del acceso al público general. En ese instante, los presentes se pusieron de pie, lo que evidenció el respeto hacia el mandatario visitante y el simbolismo de su presencia en el homenaje a Mujica.
Gabriel Boric y un detalle que no pasa desapercibido
El momento más emotivo ocurrió cuando Boric se acercó a Lucía Topolansky, viuda de Mujica, y la abrazó con afecto. Luego se dirigió al ataúd, donde colocó sus manos sobre el féretro y permaneció en silencio durante algunos segundos, en un gesto de recogimiento que fue capturado por una asistente con su teléfono móvil. La escena fue destacada por la prensa local por la intensidad del instante.
Tras rendir homenaje, el presidente chileno tomó asiento junto a Topolansky y compartieron una conversación cercana. “Lo vemos emocionado, incluso hizo unas respiraciones profundas, acercándose como un momento de emoción”, relató una periodista de Telemundo. “Se le ve muy afectuoso ¿no?”, añadió otro comunicador, recordando además que Boric había visitado recientemente la casa del expresidente Gabriel Boric.
