Un giro insólito ha tomado el caso de la brutal agresión a un
en Vitacura, con el imputado, Martín de Los Santos Lehmann, de 32 años, mostrando una actitud desafiante mientras elude a la justicia desde el extranjero. El 4º Juzgado de Garantía de Santiago acogió la solicitud de la parte querellante y dictaminó prisión preventiva para Lehmann, quien se autodenomina empresario. Sin embargo, su actual paradero fuera de Chile se erige como un obstáculo para su detención inmediata.
De Los Santos fue formalizado por el delito de lesiones graves contra el conserje Guillermo Oyarzún, un conserje de 70 años que sufrió graves heridas y perdió la visión de un ojo a raíz del ataque ocurrido la madrugada del 17 de mayo. A pesar de la gravedad de los hechos, la detención del agresor no se concretó en el acto, y su comparecencia ante la justicia se realizó de forma remota, vía Zoom. La fuga al extranjero, confirmada por él mismo en sus redes sociales, añade un elemento de complejidad y frustración al proceso judicial.
La audacia de Lehmann no termina ahí. Según detalló T13, el pasado domingo, el imputado anunció la reprogramación de una transmisión en vivo, revelando su ubicación: "Por desfase horario del país donde me encuentro, el live se realizará a las 21:00 horas de Chile", sentenció, dejando en claro que no estaba en el país. Pero lo más sorprendente de dicha transmisión fue su intento de llegar a un acuerdo con la víctima, una estrategia que, según se ha sabido, ya utilizó en el pasado para evitar condenas tras otras agresiones, pagando "cifras millonarias".
Sigue la polémica en el caso del conserje agredido
En un acto que muchos han calificado de provocación, De Los Santos Lehmann, desde su cómoda posición en el extranjero, se dirigió directamente a la víctima en el video: “Don Guillermo, usted me dice y nos juntamos a conversar como hombres y yo me hago cargo de lo suyo. Incluso evaluamos en darle una parcela en Pichilemu”. Esta propuesta, lejos de apaciguar los ánimos, generó indignación en la familia de Oyarzún. La hija del conserje fue tajante en su rechazo: “A nosotros no nos interesa ninguna parcela”.
La postura de la familia del conserje ha sido clara y contundente desde el principio. La semana pasada, Héctor Oyarzún, hijo del trabajador agredido, ya había adelantado en TVN que no aceptarán ningún acuerdo económico con Martín de Los Santos Lehmann. "Esta vez no le va a funcionar con nosotros, nosotros vamos a llegar hasta la última para que este tipo esté en la cárcel", afirmó el joven, dejando en claro que su única meta es que se haga justicia y que el agresor responda por sus actos tras las rejas.
