Fernando Solabarrieta se encuentra actualmente participando en El Internado, el nuevo reality show de Mega, una experiencia que lo ha llevado a compartir aspectos profundamente personales de su vida. Durante una dinámica en el encierro, la animadora Tonka Tomicic utilizó una gran torta de estilo matrimonial para realizar una actividad con los participantes, comenzando con una promesa: "Hay muchas cosas por descubrir de cada uno de ustedes".
El comentarista deportivo fue el primero en sacar un listón con su nombre, en el cual aparecía una palabra clave que le tocó íntimamente: "Rehabilitación". Tras desvelar el papel, Fernando Solabarrieta se abrió emocionalmente al grupo, revelando una enfermedad que lo ha acompañado por años. "Por años no sé si escondía, pero trataba de que no se me notara una enfermedad muy silenciosa y muy dolorosa que me iba comiendo", expresó el periodista al inicio de su relato.
El ex TVN ahondó en cómo dejó que su condición avanzara sin el rigor necesario. "Porque no tienes responsabilidad de enfermarte, pero sí tienes responsabilidad, y yo no me escudo detrás de la enfermedad, de no haber sido lo suficientemente riguroso con mi enfermedad y dejé que avanzara", explicó. Posteriormente, a solicitud de Tonka Tomicic, el periodista confirmó que la palabra se refería a su lucha contra la adicción. Solabarrieta detalló que la causa radica en que "algo te está doliendo tanto que no quieres sentir y te refugias en una sustancia, en una droga, en el alcohol. En cualquier cosa que tú hagas de manera desmesurada para poder dejar de sentir".
Fernando Solabarrieta y sus adicciones
La emotividad de la confesión lo embargó, llevándolo a las lágrimas y a pedir disculpas por su vulnerabilidad. Solabarrieta compartió la presión social y el conflicto interno que siente a pesar de sus logros. "Me dicen, '¿pero, hueón, cómo tú, si eres tan exitoso?' Y yo digo, 'si no soy exitoso'. Yo sé de logros, y yo no entendía por qué los logros nunca me hacían feliz, y era porque los logros nunca eran para mí, eran para que la gente me quiera", sostuvo, confesando que detrás de sus éxitos hay un profundo miedo al rechazo y la sensación de que "nada de lo yo haga es suficiente".
Finalmente, en un emotivo cierre, Fernando Solabarrieta dedicó palabras de profundo agradecimiento a su esposa, Ivette Vergara, por el apoyo incondicional. "La amo con locura y le agradezco infinitamente que nunca me haya soltado la mano, gracias amor, te amo", finalizó el periodista, haciendo pública su gratitud hacia la figura de su pareja en medio de su proceso de rehabilitación.