Este miércoles, el comediante venezolano George Harris se pronunció en redes sociales tras su controvertida participación en la noche inaugural del Festival de Viña del Mar 2025. A través de su cuenta de X (antes Twitter), Harris lanzó un fuerte mensaje en el que acusó de "xenofobia" y "boicot" las críticas y abucheos que recibió durante su actuación en el escenario de la Quinta Vergara el pasado domingo.
En sus publicaciones, el humorista aseguró que las reacciones negativas no se debían a la calidad de su rutina, sino a un ataque premeditado. "¡No es aburrición, es boicot! No es aburrición, es xenofobia. Hay que llamar las cosas por su nombre", expresó Harris. Además, señaló que muchas de las cuentas que lo criticaban eran perfiles falsos o bots, destacando que carecían de fotos, nombres reales y seguidores. "Es pura manipulación de la izquierda. ¡Dan lástima!", agregó en otro tuit.
La respuesta no se hizo esperar, y la comediante chilena Belén Mora reaccionó a las declaraciones de George Harris. Mora, quien también enfrentó abucheos durante su participación en el Festival de Viña del Mar en 2023, compartió su experiencia personal. "George, a mí también me pifiaron. Y soy de izquierda y chilena", escribió la humorista, refiriéndose al llamado "Monstruo" de Viña, como se conoce al público del festival.
George Harris y la respuesta de Belén Mora
En sus mensajes, Mora reconoció que los comediantes están expuestos a este tipo de reacciones, especialmente cuando algún chiste no funciona como se espera. "Me pifiaron porque un chiste se alargó demasiado y no causó risas. Eso puede pasar. En cada show nos arriesgamos a eso", explicó. Sin embargo, también criticó la cultura de los abucheos, destacando que este tipo de reacciones no suelen dirigirse a los músicos.
El intercambio entre George Harris y Mora ha generado un amplio debate en redes sociales, donde usuarios han opinado sobre la cultura de las pifias en el Festival de Viña del Mar y las acusaciones de xenofobia. Mientras algunos apoyan al comediante venezolano, otros coinciden con Mora en que los abucheos son una reacción común en el exigente escenario de la Quinta Vergara, independientemente de la nacionalidad o ideología del artista.
