La controversia entre Chile y Bolivia ha escalado de manera significativa a raíz de los comentarios de la diputada chilena María Luisa Cordero. Sus dichos sobre la fisiología cerebral del pueblo boliviano han generado una ola de indignación, que ha cruzado las fronteras y ha provocado una respuesta contundente por parte del gobierno boliviano, exacerbando las tensiones diplomáticas entre ambas naciones.
El presidente de Bolivia, Luis Arce, respondió directamente a la legisladora chilena a través de sus redes sociales. “Rechazamos enérgicamente las declaraciones de la diputada chilena María Luisa Cordero, quien se refirió en términos racistas y xenófobos contra el pueblo boliviano”, escribió el mandatario. Arce sostuvo que los dichos de Cordero son una afrenta al Parlamento, al pueblo chileno y a la ética médica que la parlamentaria representa.
La controversia se originó durante una sesión de la Cámara de Diputados, en la que Cordero criticó a un candidato presidencial boliviano. La legisladora afirmó que los bolivianos “nacieron en el altiplano, por lo tanto, tienen disminución del oxígeno cerebral”, a lo que atribuyó una “encefalopatía hipóxica” que los haría “tontorrones”. Sus declaraciones, que la diputada calificó como una "descripción de la fisiología del cerebro de los bolivianos", han sido catalogadas como racistas y han sido repudiadas por varios sectores.
Duras palabras del viceministro de Bolivia
A pesar de que el gobierno chileno ha condenado públicamente los comentarios de la diputada, el Viceministerio de Coordinación y Gestión Gubernamental de Bolivia, Gustavo Torrico, respondió a los dichos de Cordero con un comentario que subió la temperatura de la discusión. “Si a nosotros nos falta oxígeno a ellos les debe sobrar colágeno, ya que viven de pescado simplemente”, dijo Torrico, en alusión al acceso al océano Pacífico de Chile.
El funcionario boliviano fue más allá en su respuesta, haciendo un comentario que ha sido calificado como un golpe bajo. "Hace muchos años, una revista se preocupó de mostrar que en América, los que la tenían más chiquitita eran los chilenos”, declaró Torrico, sumando un nuevo elemento a la escalada verbal que se ha producido entre ambos países. Con la polémica lejos de terminar, queda por ver cómo evolucionarán las relaciones diplomáticas en los próximos días.
