Wilson Verdugo, imputado como presunto autor intelectual del asesinato de José Felipe Reyes, conocido como el “Rey de Meiggs”, entregó su primera declaración a la Fiscalía el pasado 23 de septiembre. Ante el Ministerio Público, el empresario detalló su relación de negocios con la víctima, la cual, según reveló T13, incluía el acceso a préstamos que ascendían hasta los $100 millones de pesos en efectivo.
Verdugo aseguró que el día del crimen acudió a dejar una cuota de $9 millones en billetes al edificio de Reyes, jurando que con ese pago se saldaba el total de la deuda que, incluyendo capital e intereses, llegaba a los $1.000 millones. El imputado relató la secuencia de ese día: “Llamé antes de ir a su departamento a Felipe y no me contestó. Cuando me subí al auto tampoco me contestó. Entregué el dinero y mandé la foto y me fui a mi casa a tomar desayuno”, afirmó. Posteriormente, confirmó que Reyes validó el pago: “A las 12:18 me llamó Felipe y me dijo: ‘está todo bien, don Wilsiton’. Me voy a hacer mis cositas, haciendo referencia a que ya había contado la plata”, reveló.
En su extenso testimonio, Verdugo también se refirió al conocido rostro de televisión, Francisco Kaminski, quien mantenía vínculos con ambos. El imputado contó que, tras enterarse del asesinato, llamó al comunicador para notificarle del deceso y solicitarle el contacto de la viuda, pero la reacción del conductor radial lo dejó sorprendido.
Novedades en el caso del Rey de Meiggs
“Llamé a Kaminski, le conté (de la muerte) y le pedí el teléfono de la viuda, porque no lo tenía. Me dijo que estaba almorzando con su hijo y ni se inmutó. Felipe a él lo ayudó harto, me llamó la atención la reacción de Kaminski, porque hablaban harto con Felipe, él lo ayudó mucho”, recordó Verdugo. El imputado añadió que la dinámica del hecho generó sospechas entre el círculo cercano: “Nadie entendía lo que había pasado y todos sospechamos. Por la dinámica de los hechos, dudamos que fuera un asalto. Pensábamos que era más un homicidio por encargo. No sabíamos el detalle de lo que se había robado”.
Finalmente, Verdugo rememoró una conversación que sostuvo con la viuda del Rey de Meiggs, quien se dirigió a su oficina con la preocupación de una supuesta deuda millonaria pendiente. El empresario afirmó que la mujer tuvo una reacción dramática al enterarse de la cifra real: “Me pidió el baño, porque casi se desmayó cuando le dije lo que debía, no le saqué ninguna cuenta simplemente le conté lo que le debía, ella me decía que había visto en el cuaderno era más plata, pero le expliqué que nunca me había atrasado en una cuota”, complementó en su declaración ante la Fiscalía.
