Con el abanderado del Pacto Fuerza de Mayoría, Alejandro Guillier, aseguró que sus planteamientos no convergen en un proyecto en común. Durante el foro organizado por la Central Unitaria de Trabajadores ocurrió un hecho que podría provocar un reordenamiento de fuerzas en la elección presidencial. El candidato presidencial del PRO, Marco Enríquez-Ominami, reconoció tener mayores coincidencias con la candidata del Frente Amplio, Beatriz Sánchez. Es más, ME-O hizo un llamado a concretar acuerdos en segunda vuelta para poder ganarle a Sebastián Piñera, reconociendo acercamientos en los planteamientos con la periodista, algo que no ha ocurrido con el abanderado del Pacto Fuerza de Mayoría, Alejandro Guillier. Sánchez reiteró que no tomará decisiones cupulares y que las conversaciones se darán después de la primera vuelta. La Democracia Cristiana es partidaria también de conversar después del 19 de noviembre, mientras que el entorno de Alejandro Guillier pretende generar acuerdos previos.