Mostraron su molestia.
Los hinchas de Universidad de Chile le declararon la guerra a Azul Azul por el mal momento de la institución, y la violencia se hizo presente en el círculo cercano del gerente Felipe de Pablo.
Esto porque un grupo de personas apedrearon la casa de unos familiares en Puente Alto y dejaron una corona de flores como amenaza de muerte.
El incidente ocurrió a las 22:00 horas, cuando de Pablo vistió a sus familiares. De acuerdo a los testimonios de los testigos, en total fueron cuatro personas que se acercaron a la casa armados y perpetraron el ataque.
“Es muy difícil, después de tantos años en el club, vivir episodios violentos que uno nunca espera ni está preparado. Son amenazas directas y no puedo estar tranquilo. No son verdaderos hinchas, son delincuentes disfrazados de hinchas”, expresó De Pablo a Mega.
De forma inmediata José Luis Navarrete, presidente de Azul Azul, llegó hasta el lugar.
“Como institución reprochamos esta conducta. Vamos a ejercer las acciones legales que corresponde con quienes resulten responsables. No hay razón para hacer partícipe a su familia de una situación deportiva. Este amedrentamiento no hace más que dañar a la familia del fútbol“, sentenció Navarrete.
Esto es segunda vez que pasa en un año. Primero fue Carlos Heller, quien vivió un hecho similar hace un par de meses y que se vio obligado a renunciar a la presidencia.
Así quedó uno de los autos de Felipe de Pablo
