Hace instantes se dio a conocer que la Cámara de Diputados envió al Senado el proyecto que dará de qué hablar durante un tiempo. Este último tipifica el delito de incitación a la violencia y el negacionismo respecto a las violaciones a los derechos humanos. Aquellas que fueron cometidas durante la dictadura de Augusto Pinochet, ya se analizan en profundidad.
Más allá de que se aprobó aquello que menciona a la incitación al odio y la violencia, por otr lado se rechazó la norma referente a la incitación a la violencia física. Siendo de esta manera, la norma que sanciona el negacionismo de las violaciones a los derechos humanos ocurridas en Chile, recibió una aprobación de 75 votos a favor. Mientras tanto, 66 fueron en contra y 6 abstenciones.
"Se sanciona así a quien justifique, apruebe o niegue las violaciones a los derechos humanos cometidas por agentes del Estado durante la dictadura cívico militar, ocurrida entre el 11 de septiembre de 1973 y el 10 de marzo de 1990", fue lo que comunicó la Cámara Baja, haciendo foco en lo mencionado antes.
Carmen Hertz, diputada del Partido Comunista (PC), indicó que "el cruce entre libertad de expresión y los discursos de incitación a la violencia, al odio y a la discriminación está resuelta en pactos internacionales de derechos humanos. Varios países lo han integrado en su legislación, como Alemania, Argentina, Holanda, Brasil, España y Uruguay, principalmente, sociedades que han sido traumatizadas con el genocidio y crímenes de lesa humanidad”.
Tucapel Jiménez también dijo lo suyo, expresando así que “la libertad de expresión tiene un límite, cuando se atenta contra la dignidad de las personas, cuando se violenta a las personas. Las palabras muchas veces causan más dolor y daño que la violencia física”.
Francisco Undurraga (Evópoli), diputado de Chile Vamos aseveró: “El negacionismo es una oda a la censura por pensar y opinar de una determinada forma, donde aparece la policía moral, donde el Estado o grupo de poder dominante determina argumentos válidos, cuál es la verdad de los hechos”.
“Si aquí se pretende sancionar a aquellos que tienen una actitud negacionista respecto de las violaciones a los derechos humanos que se puedan cometer en la historia de Chile, cuesta entender que no se aplique el mismo parámetro respecto de aquellos que niegan violaciones a los derechos humanos actualmente sucediendo en el mundo. Es decir, aquí se sanciona un negacionismo histórico y no un negacionismo actual. Esa es la incoherencia”, contó también Diego Schalper (RN) .