Benjamín Barrera Silva, de 27 años, ingresó en febrero de este año a la Escuela de Suboficiales del Ejército y se convirtió en el primer hombre trans en la historia de las Fuerzas Armadas.
Y a una semana de graduarse de «Cabo enfermero militar de combate», el joven detalló su experiencia al Movilh (Movimiento de Integración y Liberación Homosexual).
«Apenas entré a la Escuela de Suboficiales conté todo a los mandos mayores. Quise entrar con la verdad al tiro. Lo hablé con el capitán Alex Toledo, mi suboficial León y cabos de la compañía. Quizás lo conté con la intención de prevenir algún tipo de discriminación de parte de mis camaradas, pero estos reaccionaron de manera muy respetuosa», partió contando Barrera.
«Nunca discriminaron mi proceso dentro de la escuela y eso debo agradecerlo. Ha sido un proceso súper satisfactorio. Mi idea es generar un cambio de mentalidad, abrir puertas y dejar en claro que el Ejército es de todos», agregó.
«Vivimos en un país donde aún somos discriminados, pero son pequeños grupos que no tienen claro que es ser trans y la integración de nosotros a las instituciones va a opacar a esas minorías», sostuvo.
Por otra parte, desde el Ejército y el ministerio de Defensa aseguraron que la institución tiene las puertas abiertas a la inclusión.
«La inclusión y la no discriminación arbitraria son principios que deben regir a toda la sociedad y por supuesto a nuestras FFAA. Ser un buen militar no es una cuestión de sexo o género, requiere vocación, amor a la Patria y las aptitudes que nuestras instituciones exigen a todo ciudadano que postule a ellas», expresó el ministro de Defensa, Mario Desbordes.
