El periodista y conductor de televisión, conversó esta mañana con Cristián de la Fuente en “Velvet al desayuno”, en el Instagram live de @revista_velvet, en dónde desclasificó detalles de su niñez y del complejo proceso que tuvo que pasar para ser papá. Eduardo Fuentes se sinceró esta mañana y contó que antes de llegar hasta donde está hoy, generando pauta en Mentiras Verdaderas de La Red, tuvo un largo y esforzado camino.
“Como yo quería ser locutor, pero vivía en una población, cuando los vecinos me preguntaban que quería ser cuando grande y yo les decía que locutor, me miraban con cara de que tenía cero posibilidad (…) viví en La Legua hasta los 18 años, entonces las posibilidades eran muy pocas. Era una época donde tenías que tener contactos, pitutos, era muy difícil cumplir mi sueño”.
Asimismo, contó sobre sus primeros trabajos, “me puse a estudiar comunicación audiovisual, becado por el colegio, porque no teníamos para costearlo. Paralelamente tenía que trabajar para costearme los gastos, entré a trabajar en una empresa que hacían encuestas telefónicas, un día un jefe me escucha hablar y me propone una pega para el fin de semana en la misma empresa. Empecé a crecer ahí y después estaba muy bien posicionado y ganando bien. Yo con 200 mil pesos vivía bien y empecé a ganar un millón”.
Pero no todo en ascenso, Eduardo pasó de ganar un millón de pesos a cinco mil pesos, todo por jugársela en una práctica. “Me ofrecieron hacer una práctica en el Mega. Postulé y quedé. Tuve que dejar la otra pega en donde me pagaban un millón y me quede con las 5 lucas que pagaban por la práctica en el canal. Era el momento de usar mi ficha y ver si estaba realmente preparado para todo lo que había hecho”, declara.
Así y todo, el animador logró ser hoy un empresario radial, siendo parte importante de radio TXSPlus.com, emisora online dedicada a la tecnología y la innovación con audiencia en 27 países y pronta a estrenar en Brasil.
Su proceso para ser padre
Además, el periodista contó el duro proceso que tuvo que pasar para ser padre. “Me entregaron el diagnóstico de una manera muy brutal. El medico después de haberme hecho el espermiograma, sin mirarme, me dice ‘básicamente no vas a poder ser papá’, a lo que yo le pregunto ¿no puedo ser papá o me va a costar ser papá? porque si me va a decir que no voy a ser papá es una sentencia y si me dice que me va a costar es un desafío. Finalmente me dijo que me iba a costar”.
Luego de eso, agrega que “con mi actual pareja queríamos ser papás y nos dimos cuenta que ella también tenía problemas para tener hijos. Probamos e intentamos muchas veces y en un minuto dijimos, ¡no más! De pronto, por tres medios distintos nos llega el nombre del mismo doctor, lo fuimos a ver, nos presentó una técnica diferente al resto y decidimos ir por una última. En el primer intento lo perdimos, fuimos por el segundo intento y en un examen el doctor nos dice “estamos” y nosotros respondimos “¿estamos qué?” a lo que el responde “estamos embarazados”, sentencia.