Una estremecedora revelación sobre el asesinato de la extrabajadora de Mega hace ruido.
Horas atrás, el asesino de la extrabajadora de Mega, Albertina Martínez, contó cómo fue todo en el momento que la mató. En horas de este lunes, el juicio por el homicidio de la joven fotógrafa que trabajaba como asistente en un canal de televisión inició. No está de más recordar que la mujer de 38 años fue encontrada muerta en su departamento, el 20 de noviembre de 2019. Dos meses después, el autor, Jairo González Miranda, de 19 años, fue detenido.
Cuando se llevó a cabo su formalización, en febrero del año 2020, el mencionado resaltó que la víctima y él sí se conocían, además que fue a su hogar para venderle drogas. Tras eso, la Fiscalía viralizó videos de las cámaras de seguridad que confirmarían la participación de Jairo en la muerte de Albertina, la extrabajadora de Mega. Sin dudas, un hecho que aún deja mucho para analizar.
En la primera audiencia, Jairo González sostuvo cómo habría sido la muerte de la mujer. Este comentó que consumieron drogas, además que después de eso quiso robarle. Ya en dicha situación, gracias al forcejeo, esta cayó inconsciente. Cuando notó lo que ocurría, la amarró de piernas y brazos y le tapó la boca con un paño para que no pudiera emitir sonidos. Sin embargo, asegura que cuando se fue, ella aún tenía vida.
El triste final de la exfotógrafa de Mega
A raíz de esas declaraciones, el fiscal de la Fiscalía Centro Norte, Arturo Gómez, expuso que la autopsia indicó que tuvo golpes en la cara, además de ser estrangulada y que culminó con un traumatismo encefalocraneano. Para cerrar, determinaron su prisión preventiva por el asesinato. Ante eso, el imputado renunció a su derecho a guardar silencio y emitió más palabras sobre lo que hizo.
Según CHV Noticias, el asesino de la extrabajadora de Mega dijo: “Yo voy a declarar. Estábamos compartiendo con Albertina en el sillón, sentados los dos, hablando, y ella se acercaba con otras intenciones. Yo en el momento estaba drogado y me sentía atrapado. Ella se enfadó y me dijo que era fome, que la iba a ver y me iba altiro. Reaccionó mal y me tiró un vaso de cerveza en el cuerpo y yo reaccioné mal, lo admito, pero estoy arrepentido de haber reaccionado así, la empujé. Le hice un nudo alrededor de la boca para que ella no pudiera alertar a los vecinos y ellos no me hicieran nada. Yo estaba nervioso, estaba asustado”.
